Una caminata a paso ligero diaria puede contribuir a mantener un peso saludable, mejorar el estado de ánimo y a prevenir o controlar enfermedades cardíacas, la presión arterial alta y la diabetes de tipo 2.
No hay médico que no le recomiende a su paciente, en condiciones normales, claro, hacer algo de actividad física diaria, y muy especialmente caminar. Por ello, no hay persona que no sepa o al menos intuya, que caminar y ejercitarse es bueno para la salud.
Y hacer algo de actividad física es relativamente sencillo, económico y benéfico para la salud. Más allá de dietas y planes de entrenamiento para mejorar nuestra condición, lo único realmente indispensable es realizar una actividad física, o sea, caminar. Y en ese sentido, cuanto más rápido, más lejos y más frecuentemente lo hagas, pues mejor.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de Mayo Clinic, en Estados Unidos, recomienda como meta general caminar por lo menos 30 minutos al día. Lo ideal es empezar con una meta simple –empezar, por ejemplo, con 5 o 10 minutos al día— hasta habituarnos, y así gradualmente ir aumentando el tiempo.
IMPORTANTES BENEFICIOS
Una caminata a paso ligero diaria puede contribuir a lo siguiente: