Atendiendo el llamado del Ministerio de Salud sobre una serie de recomendaciones de autocuidado tanto para los adultos como para padres de familia que piensan disfrazar a sus hijos en Halloween, es importante el uso de mascarillas.

En el mercado hay innumerables tapabocas con divertidos dibujos acordes a tan esperada celebración hay con estampados alusivos a las arañas, carabelas, zombies y demás figuras terroríficas.

Como el Carnaval, Halloween es una de las celebraciones en que podemos ponernos más creativos sobre todo al momento de armar un disfraz, pero si no le gusta disfrazarse entonces nada más con un buen maquillaje en los ojos, la persona puede sorprender de manera distinta para la ocasión. No hay duda que con el maquillaje se pueden crear muchos looks y poner a volar la imaginación.  

Vanessa Vergara, experta en maquillaje y reconocida asesora de imagen, explica que si no quieres pintar tu rostro con elementos característicos de la Noche de Brujas  puedes optar por resaltar nada más los ojos aplicando colores llamativos como el verde, naranja, negro y con un poco de escarcha para darle iluminación. El complemento ideal sería un top o vestido de lentejuelas. “Así estaría la persona lista para cualquier tipo de fiesta”, explica.

En cuanto a los niños, es importante utilizar productos aptos para sus delicadas pieles. Los expertos dicen que los mejores son con base de agua para poder retirarlos fácilmente. Además del imprescindible tapabocas, en la frente y alrededor de los ojos se puede realizar un maquillaje artístico, teatral.  Los imprescindibles: colores blanco y negro, insistir en las cuencas de los ojos para acentuar el aspecto cadavérico y trazar una dentadura de miedo. El cabello peinado hacía atrás refleja el vampiro, aunque con las mascarilla solo se vea media cara. Y si quieres que también se vean los colmillos, nada tan sencillo como pintarlos sobre una mascarilla quirúrgica.