San Miguel de Allende, bella ciudad colonial del estado de Guanajuato (México), fue el lugar escogido para la boda de Mauricio Espinosa Tcherassi y Mariel Salazar Beltrán. 500 invitados, provenientes en su mayoría de otros estados de México, Colombia y Estados Unidos acompañaron a la joven pareja. Como era de esperarse, el estilismo Tcherassi imperó en los lokks de la mayoría de las damas invitadas tanto en los actos previos (almuerzo y coctel) como en la bella ceremonia religiosa y en la gran fiesta.