Digo esta frase porque en ocasiones existen enfermedades hereditarias que el paciente no puede controlar, ya que está en sus genes y por lo tanto es parte de su genética.
Sería innumerable la cantidad de enfermedades hereditarias. En cardiología, observo algunas muy importantes como la hipertensión arterial, la cardiomiopatía hipertrófica, intervalo QTC prolongado o corto, entre otras, la misma enfermedad coronaria, es de suma importancia. Hijos de padres jóvenes con antecedentes de infarto hay que estudiarlos con cuidado y de manera precoz; existen muchas otras, pero quiero hacer un énfasis general no solo en cardiología, el cáncer de mamá, el de próstata, de pulmón entre otros. En Oncología, las artritis, la famosa fibrosis quística, en fin, sería interminable la lista en todas las especialidades en cuanto a enfermedades hereditarias, y esto no lo podemos modificar, pero ¿qué hacer cuando en la familia hay una enfermedad genética hereditaria? anote inmediatamente esta información y compártala con su médico, ideal que sea el especialista de dicha patología para no perder tiempo ya que en manos de otro que no maneja dicha enfermedad y tal vez no te puede orientar como es debido.
Aún peor en ocasiones se pueden transmitir enfermedades genéticas a nuestros hijos, aunque no las padézcamos; basta con ser portadores para que nuestros hijos o nietos puedan padecerla, en este contexto es aún peor la situación.
Es importante aclarar que una enfermedad genética es cuando hay uno o más genes que están alterados, si dicha alteración se transmite a la descendencia, hablamos de enfermedad genética hereditaria.
Hay que tener claro es que no todas las enfermedades genéticas son hereditarias ya que muchas veces no se transmiten a los hijos.
Hay que diferencias entre enfermedad hereditaria y genética, las hereditarias no tienen por qué manifestar síntomas desde el momento del nacimiento, pero las congénitas sí lo hacen.
Mi mensaje es que en toda familia es importante tener claro esto para evitar consecuencias funestas.
Como dije anteriormente, no podemos controlar el viento pero sí ajustar las velas para enderezar en camino.
En otras ocasiones el ambiente juega un papel muy pero muy importante, por ejemplo en la diabetes, que tiene un origen genético, pero además juega un factor que, además de genético, es el ambiental,donde la carga genética tiene mucho peso, pero para que se desencadene la patología también juega un papel importante otra circunstancias, como es el estilo de vida.