El Ballet Nacional de Colombia en una de las escenas más coloridas: el mercado campesino.
El colectivo los celebra en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán en homenaje al legado de Sonia Osorio, su fundadora.
El año pasado no pudo celebrar los 60 años de su fundación porque llegaba con fuerza la pandemia, pero esta vez sí, (con dos funciones hoy siete de agosto en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán de Bogotá) en las que hubo derroche de folclor y danza de nuestro país en homenaje al legado de su fundadora Sonia Osorio. Nos referimos al Ballet Nacional de Colombia.
A lo largo de seis décadas de música y baile, este colectivo ha sido creativo y artístico, que a través de la investigación de las raíces ancestrales y de la cultura colombiana ha aplicado técnicas modernas del ballet para resaltar la esencia de las tradiciones rítmicas y musicales de Colombia. Hizo una mezcla perfecta entre la raíz del folclor y la sofisticación de las danzas modernas, lo que le permitió al Ballet participar en los más importantes festivales y recibir reconocimientos.
Sonia Osorio fue una de las embajadoras nuestro folclor en el mundo. Su trabajo la convirtió en una de las mujeres que más impulso internacional le dio a la cultura nacional colombiana, a través del baile. Logró llevar la compañía por los escenarios más importantes del planeta colocando muy en alto el nombre de Colombia.
Además de coreógrafa, fue diseñadora de la mayoría de los vestuarios de la agrupación. Impuso disciplina y siempre fue exigente. En varias ocasiones dijo que Barranquilla, sobre todo el Carnaval, había sido su principal fuente de inspiración, valorando también las danzas tradicionales del Caribe, Pacífico y el interior del país.
Nació en Bogotá, pero vivió por muchos años en Barranquilla, tierra del recordado e insigne pintor Alejandro Obregón con quien se casó y tuvo dos hijos. En esta capital atlanticense, Sonia Osorio fue una de las coreógrafas más solicitadas en el montaje de espectáculos como coronaciones de las reinas del Carnaval, comparsas en los clubes y otros eventos de gran magnitud.
En el amplio repertorio del Ballet figuran montajes de joropo, cumbia, sanjuanero, bambucos, vals, mapalé y currulao, entre otros bailes tradicionales en los que están representadas las diferentes culturas de Colombia.
Antes de fallecer Sonia Osorio (a los 83 años en Cartagena, en marzo de 2011) como consecuencia de una infección renal, ya su hijo, el reconocido actor Rodrigo Obregón, había tomado las riendas del Ballet de Colombia. Desde 2006, bajo su dirección, impulsó el legado de su madre y generó nuevas propuestas para mantener el espectáculo a la vanguardia presentándolo año tras año en los teatros bogotanos.
En el cine, Rodrigo hizo más de 40 películas y compartió con figuras como Franco Nero, Bo Svenson, Ernest Borgnine y Arnold Schwarzenegger. A su regreso a Colombia trabajo en la telenovela Escalona en la que hizo de villano.
En 2019 murió de una neumonía en Barranquilla, donde se había radicado por un tiempo.
El Ballet Nacional de Colombia, hoy está bajo la dirección de Silvana Obregón Osorio hija de Sonia Osorio y de su nieto Martín Viera Obregón quienes continúan con el concepto artístico, la escuela y el estilo que impuso la inolvidable Sonia Osorio.
