En América, los llamados ‘Estados sin litoral’ son dos. Oceanía es el único continente que no tiene, mientras que África cuenta con 16. La mayoría son países en vías de desarrollo, tienen altos niveles de pobreza y afrontan conflictos con otros países.

Cuando se ha nacido o crecido frente o muy cerca al mar, disfrutando la experiencia sin igual de sumergirse en él, contemplar sus bellos atardeceres y/o amaneceres, o de sencillamente tumbarse y disfrutar de la brisa, el sol y de la playa, cuesta trabajo creer que en el mundo millones de personas no tienen acceso al litoral y que quizá nunca en su vida lleguen a conocerle.

Es que aunque parezca mentira, en el mundo hay 44 ‘Estados sin litoral’, que es como se les conoce formalmente. Países que, por decirlo de alguna forma, están encerrados, atrapados, rodeados de otros territorios, o como se dice técnicamente, están en ‘mediterraneidad’. Así tengan costas marítimas por tener mares interiores o cerrados, si estos no están conectados a un océano, no cuentan como ‘salida al mar’.

La mayoría de estos territorios tienen en común que son considerados países en vías de desarrollo con altos niveles de pobreza. Para Mussie Delelegn, jefe de la Sección de Países en Desarrollo sin Litoral de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), se trata de naciones marginadas del comercio internacional. «Su desventaja geográfica los obliga a incurrir en mayores costos de transporte», dice, para poder importar y exportar productos.

LOS CASOS DE BOLIVIA Y PARAGUAY

Históricamente, el acceso directo al mar es un aspecto estratégico que ha sido causa de conflictos y enfrentamientos bélicos. En efecto, muchas de las disputas territoriales de la historia y de la actualidad están directamente relacionadas a conflictos internacionales por el acceso al mar o al océano.

Prueba de lo anterior es lo que ocurre en el continente americano, donde dos países pertenecen a la categoría de Estados sin litoral. Uno de ellos es Bolivia, que hace muchos años afronta un con conflicto por  situación de mediterraneidad, dado que queda sin salida al mar tras perder 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.

Desde 1920, el Estado de Bolivia reclama su acceso al océano Pacífico a las Repúblicas de Chile y Perú. En la actualidad el conflicto se da principalmente entre Bolivia y Chile, quienes disputan el llamado ‘corredor de Atacama’ y que actualmente dominado por Chile, por lo que los bolivianos siguen sin salida al mar. Por otra parte, Bolivia puede salir al océano Atlántico gracias a la hidrovía Río Paraguay—Río Paraná—Río de La Plata.

Paraguay es el otro país americano que no cuenta con salida al mar, la cual perdió incluso antes de ser un Estado soberano e independiente. En 1617, durante el gobierno de Hernando Arias (Hernandarias), se produjo la división de la Provincia en dos gobernaciones: la del Paraguay y la de Buenos Aires. Al igual que Bolivia, Paraguay puede salir al océano Atlántico gracias a la hidrovía Río Paraguay—Río Paraná—Río de La Plata.

EUROPA, ASIA, ÁFRICA Y OCEANÍA

En Europa son 14 los países sin litoral: Andorra, Austria, Bielorrusia, Ciudad del Vaticano, Eslovaquia, Hungría, Liechtenstein, Luxemburgo, Moldavia, República Checa, República de Macedonia, San Marino, Serbia y Suiza.

Por su parte el continente africano tiene 16 países, por decirlo de alguna forma, encerrados: Botsuana, Burkina Faso, Burundi, Chad, Etiopía, Lesoto, Malaui, Malí, Níger, República Centroafricana, Ruanda, Suazilandia, Sudán del Sur, Uganda, Zambia y Zimbabue.

Y en Asia son 12 las naciones sin salida al mar. Son ellas: Afganistán, Armenia, Azerbaiyán, Bután, Kazajistán, Kirguistán, Laos, Mongolia, Nepal, Tayikistán, Turkmenistán y Uzbekistán. 

Oceanía, por ser en sí mismo un continente insular, es el único que no tiene países sin salida al mar. Recordemos que está constituido por la plataforma continental de Australia, las islas de Nueva Guinea, Nueva Zelanda y los archipiélagos coralinos y volcánicos de Melanesia, Micronesia y Polinesia.

Esta revisión político-administrativa arroja curiosidades tales como que en el mundo hay dos estados que están doblemente aislados, es decir, que además de no tener salida al mar, están a su vez rodeados de otros países sin litoral.

Se trata de Liechtenstein, que tiene de vecinos de Austria y Suiza, y Uzbekistán, rodeado por Afganistán, Kazajistán, Kirguistán, Tayikistán y Turkmenistán.

Hay otros tres estados encerrados en ciudades, es decir, comparten frontera con un solo Estado: Ciudad del Vaticano, con poco más de 800 habitantes y que está acorralado dentro de Roma; y San Marino, dentro de Milán, ambos en Italia, con cerca de 34 mil habitantes. Y el tercero es Lesoto, con más de dos millones de habitantes, el cual  está todo rodeado en su totalidad por Sudáfrica.