La joven cantautora, actriz y bailarina, hija de barranquilleros, tuvo una emotiva y aplaudida presentación interpretando el tema ‘Applause’, en la apertura de la imponente ceremonia celebrada en el Dolby Theatre de Los Ángeles.

Cantar ante tantas celebridades del mundo del entretenimiento y ser vista por millones de televidentes que siguieron la transmisión en directo de edición número 95 de los premios Oscar, una de las citas más glamorosas de Hollywood, no todo artista podría darse semejante lujo. Mostrar el talento en ese escenario es la consagración de cualquier intérprete, más si es tan joven como le sucedió a Sofía Carson, cuyo debut en esa ceremonia se llevó todos los elogios del público.

Cuando la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas la llamó para anunciarle su participación en la gala, la actriz, cantante y bailarina estadounidense de ascendencia colombiana pegó un brinco de la emoción. No era para menos. Sobre todo, porque fue la elegida para cantar el tema Applause que estuvo nominado a mejor canción original por la película Tell It Like a Woman, y estar acompañada en el piano por la misma autora de la canción, nadie menos que Diane Warren, una de las compositoras más celebres de la música moderna que ha recibido 12 nominaciones a los Oscar, es ganadora del Grammy, Emmy y Globo de Oro.

En la 68ª edición del Festival de Cine de Taormina, celebrado el año pasado en Italia, Sofia había cantado el tema con Diane Warren, esa vez tocando la guitarra, en el estreno de la cinta.

La escogencia de Sofía, además de ser la encargada de abrir la ceremonia realizada en el Dolby Theatre de Los Ángeles, fue en reconocimiento a su trabajo en series como  Austin & Ally de Disney Channel en 2014 y uno de los personajes principales de la saga Descendientes de Disney Channel Original Movies, que le permitió dar su gran salto a la fama, porque además de actuar mostró sus dotes de cantante y compositora. Así se fue abriendo paso en Hollywood.

Ha grabado películas y discos y ha hecho presentaciones en festivales tan famosos como el Coachella en California y Pop Spring en Japón, ha realizado conciertos en solitario, su voz es escuchada en el tema central de la película El Rey León, y trabajado como actriz en varias cintas como Siente el ritmo de Netflix, en la que es protagonista.  

Apenas la orgullosa familia de Sofía supo la noticia que estaría cantando en los Oscar, su abuela Lauraine de Char, sus tíos Linda y Roberto, con sus respectivas parejas, comenzaron entonces a empacar maletas para viajar desde Barranquilla (Colombia) y acompañarla en este logro de su carrera artística. Obviamente, en la gala no podían faltar su mamá Laura y su hermana Paulina, quienes residen en Los Ángeles.

Fiel a su estilo clásico, a su llegada a la alfombra (que este año cambió el rojo por el color champan “para cuidar a las estrellas de las cámaras y crear un efecto nocturno) la estrella de Disney lució una creación de voluminosa falda (de Giambattista Valli, su diseñador de cabecera) con un corpiño ceñido al cuerpo que complementó con un costoso collar de Chopard con 122,49 quilates de esmeraldas octogonales y 92,57 quilates de diamantes.

Al subir al escenario lució el segundo vestido color champagne y con una capa superpuesta, y para la fiesta organizada por Radhika Jones, editora de la revista Vanity Fair,  en el Wallis Annenberg Center en Beverly Hills, se puso otra creación de corte columna con hombros caídos y pequeños volantes de color champagne, con franjas de brillos.

Una vez terminado el acto de premiación, a la exclusiva fiesta de Vanity Fair asisten los famosos que van a celebrar por lo alto, hayan sido ganadores o no. Como lo hizo Sofía, es tradicional ver a la mayoría con un segundo look para disfrutar del relax y la euforia con copa de vino en mano.

Al día siguiente, los Daccarett Char se reunieron en familia para festejar con un almuerzo el brillante desempeño de la joven artista.