Definitivamente el contorno de los ojos es la primera zona del cuerpo donde se notan los efectos del estrés, insomnio y cansancio.

Lo anterior es debido a que esa parte de la piel es muy fina y sensible. Pero si sumamos la llegada de los años, la falta de hidratación, una mala alimentación y hasta la misma genética de nuestro cuerpo, pueden provocar que las ojeras sean más notorias.

Sabemos que existen en el comercio diferentes marcas de correctores de tonos naturales que en un abrir y cerrar de ojos disimula las ojeras, pero qué pereza estar atenido a estos productos y utilizarlos cada vez que se quiere tener un buen aspecto del contorno de los ojos.

Desde tiempos atrás siempre se ha dicho que uno de los remedios caseros es la aplicación de dos rodajas de pepino sobre los ojos. Esas rodajas tienen que ser muy frías y puede colocárselas durante 30 minutos. ¿Por qué lo frío ayuda más? Porque el pepino ayuda a combatir la resequedad. Contiene vitamina E y su poder hidratante ayuda a reducir las ojeras y las bolsas

Bolsas de té, manzanilla o una compresa fría sobre cada ojo también ayudan sin duda a reducir la hinchazón.

Otro de los remedios más habituales es utilizar dos cucharas de postre, luego de meterlas en el congelador, y colocársela durante unos minutos sobre los parpados, el frío conseguirá que se reduzca el inflamación de la zona.

En el mundo de la cosmética profesional, para la hidratación, protección, y nutrición de la piel cada vez son más utilizados los aceites naturales ya que contienen numerosas propiedades muy beneficiosas.

Uno de ellos es el aceite de almendras que es rico en vitaminas A, B y E. Este aceite de rápida absorción también ayuda a mejorar el contorno de los ojos gracias a su poder ultra hidratante que ayudará a reducir arrugas y rejuvenecer la mirada.