El monteriano Diego García, radicado en Barranquilla hace dos años y medio, está al frente de una firma consultora en la que confluyen proyectos y diseñadores independientes de otras latitudes.
Muebles para una empresa estadounidense; diseño de marca para una constructora argentina; mobiliario urbano y señalética para el Sistema de Transporte Público de Santa Marta; animación para una empresa en Barcelona, diseño de productos para otra de México, zapatos en iraca para una firma de Barranquilla…
Son proyectos que, aunque disímiles, tienen algo en común. Todos fueron cocreados, gestionados y cristalizados en Diego Ge Design Consultant, la firma consultora que el monteriano Diego Luis García Estefan concibió en 2018 como una agencia digital que permitiera crear una red de trabajo de diseñadores independientes como él, a la vez que servía de multiplicadora de clientes.
“Lo que pensé era que si trabajábamos en equipo, podíamos atender a nuestros clientes en menos tiempo, no importa el lugar donde estuviéramos, y entonces tendríamos más espacio para gestionar nuevos proyectos y nuevos clientes”, explica el joven de 33 años.
Así se juntó con familiares que tenía en Argentina con los que trabajó todo el concepto de la imagen gráfica de una constructora; también con su hermano arquitecto, que diseñaba una terminal de transferencia de pasajeros en Gaira; y con sus amigos en Barcelona, Ciudad de México, Estados Unidos para otros proyectos… “Es que, por ejemplo, una propuesta de diseño de un espacio interior que es fruto del trabajo de un equipo, siempre será más rica, más compleja, que si la hace una sola persona”, apunta.
Este profesional salió de Montería a los 16 años, rumbo a Bogotá, donde estudió diseño industrial en la Universidad Javeriana. Tras terminar, trabajó un tiempo con una empresa de diseño interior, pero renunció para irse para Buenos Aires a especializarse en Gestión estratégica de diseño.
En 2012 regresó a Bogotá, donde trabajó ocho meses como free lance en desarrollo de marca, logotipo, mobiliario y animación en dos dimensiones. Al final de ese año, una firma que tenía a su cargo un proyecto de diseño de calles y parques en Apartadó, en el Urabá antioqueño, lo llamó para que trabajara con ellos en el desarrollo de mobiliario urbano.
Después lo llamaron del departamento de Planeación en la Gobernación de Córdoba, como asesor en proyectos de cooperación internacional, lo cual le brindó la oportunidad de trabajar con comunidades.
En 2015, Artesanías Colombia buscaba un profesional para el montaje de un laboratorio para la implementación y diseño de nuevos productos artesanales en Córdoba, que tuvieran el ADN del artesano y el conocimiento del diseñador de interiores. García Estefan estuvo tres años en ese cargo y simultáneamente también dirigió el laboratorio de Sucre.
Pero en 2017 empacó maletas y se fue a Italia, a hacer una maestría en Diseño e innovación en el Politécnico de Milán y al tiempo se vinculó a Momo Design, un estudio italiano donde, dice, “se hace diseño de verdad verdad”. Para é fue una experiencia “enriquecedora” que le permitió, en muy pocos meses, hacer de todo: pasaba de diseñar una aspiradora a hacer un módulo de ventas, una estufa o una pistola plástica para jardinería, entre muchas otras cosas.
Paquete gráfico, coffee bar, mesón o encimera de cocina, señalética, consola y pistola de jardinería diseñadas por la firma Diego Ge Design Consultant..
Fue estando en esas cuando decidió crear su marca en 2018, para que fuera como una especie de sombrilla para diseñadores independientes. Al año siguiente volvió a Colombia y esta vez Artesanías de Colombia volvió a reclutarlo para que dirigiera el laboratorio desde donde pudiera brindar asistencia a los artesanos del Atlántico, para que mejoraran su cadena de valor.
Vino la pandemia y con ella el año del florecimiento de Diego Ge Design Consultant, proyecto que, entre otras, hoy hace parte de la lista de emprendimientos innovadores apoyados por el programa Quilla Innova, de la Alcaldía de Barranquilla. Diego cuenta que en 2020 el ritmo de trabajo fue el ideal, porque cada mes tuvo un proyecto nuevo para ejecutar. El proyecto más reciente ha sido el diseño de cuatro colecciones para una empresa norteamericana con sede en Miami que produce muebles para exteriores en la Zona Franca Cayena.
“Yo no hago ni vendo el producto; yo hago la consultoría para el diseño, y en este sentido la clave está en la cocreación, en involucrar al cliente en el diseño”, explica al final Diego García, quien lleva dos años y medio radicado en Barranquilla, donde dice al final se siente muy bien y contento.