Lo último / 17 de junio de 2023

“De mi papá heredé…”

Patricia Escobar

El rey vallenato Javier Matta, el cantante Boris García, el productor Víctor Pacheco, y Anthony Acosta, hijo de Checo y nieto de Alci Acosta, hablan de sus progenitores y del legado que les dejaron. También el consultor y estratega Ricardo Restrepo presenta, de su puño y letra, una bella semblanza del legado su padre.

Los padres no sólo determinan el sexo del bebé, sino que son determinantes en la personalidad de sus hijos, sean niños o niñas. Y aunque es cierto y está demostrado que una madre sola puede llegar a sacar adelante a sus hijos, también es cierto que la ausencia del progenitor deja una huella indeleble en sus descendientes. Y que lo que sus genes aportaron en su concepción estará allí para siempre.

Todos los humanos tenemos 23 pares de cromosomas en cada célula. Uno de los pares de cromosomas es el que lleva la información relativa al sexo, siendo XX en caso de las mujeres y XY en caso de los hombres. Las células sexuales sólo tienen un cromosoma. En el caso de la mujer, al ser XX, los óvulos serán siempre X. En el caso del hombre, pueden ser el uno o el otro, es decir, los espermatozoides pueden ser X o Y.

La herencia biológica de un padre a su hijo se mide por la transmisión de características físicas que son traspasadas, como el color de los ojos, el de la piel, el del pelo, la altura y el peso, entre otros; pero además está la herencia expresada por cualidades y conocimientos que los hijos aprenden de sus progenitores.

Pero sin ahondar mucho en el tema fisiológico, es necesario hablar de la importancia de los padres y de lo que la UNICEF llama Paternidad Activa, que no es otra cosa que estar presente en la vida de los hijos desde su primera infancia y hasta por lo menos su adultez.

Los estudios indican que una paternidad activa entrega múltiples beneficios para niños y niñas, ya que estos se desarrollan más sanos y mejor. Un papá comprometido y afectuoso aporta una mejor autoestima, más habilidades sociales, apoya con un mejor desempeño escolar y entrega bienestar psicológico para los niños y niñas.

A propósito del Día del Padre, MiREDvista entrevistó a un grupo de personajes de nuestra región para conocer cómo es o cómo ha sido la relación con sus padres, qué tan activa fue la paternidad de ellos y qué le heredaron tanto en el físico como en el temperamento.

LOS ACOSTA

El maestro Alci Acosta, su hijo Checo y su nieto Anthony.

Alcibiades Alfonso Acosta Cervantes, Alci Acosta, a sus 84 años de edad, es sin lugar a dudas, el más grande intérprete del bolero y la música sentimental de Colombia que ha permanecido vigente por más de 60 años.

Nacido en Soledad, Atlántico, se ha caracterizado por su talento, pero sobre todo por seriedad, humildad, compromiso y respeto. Ha sido un hombre que ha pisado grandes escenarios en América y Europa que por nada del mundo optó por vivir lejos de su terruño. No protagonizó escándalos, ha manejado un bajo perfil, y lo que se conoce de su vida persona ha sido a través de dos de sus grandes amores: Ruth Acosta, ya fallecida y con quien estuvo casado 60 años, y su hijo Checo, músico como él.

Físicamente Checo se parece a su padre en la forma de los ojos y las cejas, y aún en “la forma de la cabeza”, dice Anthony, el único nieto varón de Alci. De él heredó su terquedad y su profesionalismo. Ambos han sido entregados y respetuosos del trabajo que escogieron.

Anthony, segundo hijo de Checo, se parece a su padre en la contextura de su cuerpo. A pesar de la diferencia de edad, ambos usan la misma talla en la ropa. En cuanto a la personalidad, el chico dice: “somos extremadamente ordenados y exigentes. Nos gusta que todo salga tal como lo hemos planeado. No podemos ver un cuadro torcido, no soportamos un baño desordenado y la ropa tiene que estar siempre bien puesta”.

LOS MATTA

Javier Matta Correa, de 33 años, oriundo de Santa Marta, es el actual rey profesional del Festival de la Leyenda Vallenata, una distinción por la cual luchó sin tregua desde que era un niño.

El rey vallenato Javier Matta, con su papá Javaier, su mamá Martha Cecilia y su hija.

Heredó de su padre no solo el nombre, sino el temperamento fuerte. Ambos parecen imperturbables, pero “se derriten” ante personas o situaciones que los vuelven frágiles. Al padre, por ejemplo, su hijo lo conmueve cada vez que va a participar en un concurso. Siempre ha sido su escudero, su mejor fanático, el que más sufre y el que más goza. Al rey lo “derriten” las mujeres sensuales y dulces, aparte, por supuesto, de la música.

Su papá es del Tolima pero desde hace mucho tiempo vive en Santa Marta, donde se convirtió en ingeniero agrónomo que ama y lucha por el campo. Y ese amor por lo que se hace lo heredó su hijo, quien reconoce que su papá lo ha apoyado en todo y le ha dado libertad para elegir, eso sí “exigiéndole” que asuma la responsabilidad de sus decisiones.

Javier, el rey, cree que se parece físicamente más a su mamá y que de su padre heredó las piernas flacas y “lo desnalgado”, asegura entre risas.

LOS GARCIA

Eduardo García Martínez es un afamado escritor y periodista nacido en Ovejas, Sucre, tierra de la gaita. Vivió y estudio en Medellín, por allá en años 70. Posteriormente se radicó en Cartagena, donde según él “encontré el ambiente propicio para afincar mi hogar y dar riendas a la escritura” que, para muchos críticos es “certera y mágica”.

Eduardo García y su hijo Boris.

Boris, el cantante y creador de importantes movimientos musicales del Caribe, es su hijo y creció escuchándolo cantar, sobre todo boleros. Muchas veces, en su niñes lo acompañó a cantar.  “En ocasiones, en las callecitas cartageneras uní mi voz a la suya para entonar temas que evocaban las confrontaciones universitarias de la época. No faltaron los temas de Daniel Santos, Bienvenido Granda, el Benny Moré ni Rolando Laserie quienes, desde entonces, son nuestros amigos irremplazables, como han sido los cultores del porro, la gaita y toda la música que sale del alma caribeña”, afirma.

Padre e hijo se parecen, físicamente en el color de la piel, en los ojos y la mirada que, según Boris es “inquieta y atrevida”. Pero el rasgo más característico es el color de la voz. Los expertos dicen que tienen la misma tonalidad.

En cuanto a personalidad, Boris heredó de su padre el temperamento, entre fuerte ante las dificultades y entusiasta ante la vida, la forma de escribir, el gusto por la buena música y la familiaridad. Y aunque ha agradecido eso le hubiera gustado heredar la lectura como tarea diaria y la estética al contar historias.

LOS PACHECO

LOs ‘Pachequito’: Victor Danilo y Víctor Enrique.

Suán, en el departamento del Atlántico, vio nacer hace 50 años a uno de los más talentosos futbolistas de Colombia: Víctor Danilo Pacheco Bustamante, conocido como “Pachequito”. Se inició profesionalmente en el Junior de Barranquilla, equipo con el que dos veces fue campeón. Militó en otros equipos colombianos y estuvo en México y Canadá. Actualmente es veedor de las divisiones inferiores del Junior.

Su hijo Víctor Enrique Pacheco Barrios, logístico y productor de campo, también apodado “Pachequito” solo se parece físicamente al deportista en las cejas pobladas y muy oscuras. En estatura es más alto que su padre casi 10 centímetros. El padre calza 7.5 y el hijo, 9.5.

En cuanto a personalidad, “yo le heredé casi todo” afirma con orgullo. Ambos son amables, mamadores de gallo, tranquilos, serviciales y desordenados en la casa. “Somo un desastre para ubicarnos con direcciones, para la cocina, para el orden, pero eso sí, no le negamos ayuda o apoyo a nadie”, enfatiza Pacheco Barrios.

Ambos, por supuesto, aman el fútbol, pero el hijo reconoce que no le llega ni a los tobillos al crack atlanticense.


“Lo que heredé de mi padre”

Por Ricardo Restrepo Roca*

“De tal palo, tal astilla” reza un adagio popular, y vaya la sabiduría que esconde este dicho, puesto que los hijos tenemos impreso el sello de nuestros padres, bien por el parecido físico o bien por el parecido en nuestro carácter y personalidad.

Ricardo Restrepo Diaz
Ricardo Restrepo Roca

Tengo el privilegio de ser hijo de Ana Elvira Roca Baena y de Ricardo Restrepo Diaz, quien partió de este mundo hace casi 34 años y rozando apenas sus casi 50 de vida. Con gratitud recibo la invitación de MiREDvista para compartir en este Día del Padre aquello que me asemeja tanto a él y que aún, en la memoria y recuerdo, tienen quienes fuimos su familia, amigos y conocidos.

Heredé de mi padre su vocación de servicio y compromiso por su ciudad; sus gustos por la buena música y los viajes por el mundo, pero más allá, unos principios y valores que fueron sello en su vida personal y profesional y son distintivos en la mía.

Si bien tuvo un paso muy corto como servidor público, nunca fue ajeno a la cosa pública y a sumar en los retos y solución de los problemas que aquejaron a Barranquilla durante años. Fue activo miembro de la Sociedad de Mejoras Públicas, miembro de Juntas Directivas de distintas organizaciones y tuvo el privilegio de pertenecer a aquella generación de grandes hombres que ha dado esta bella ciudad y que lograron grandes obras para esta, como el Aeropuerto Internacional Ernesto Cortissoz, el Teatro Municipal Amira de la Rosa, la sede administrativa de la aerolínea Avianca en la calle 72 y, por supuesto, la Galería de Arte de Avianca que acogió exposiciones de los más grandes artistas de nuestro país y del mundo.

Su ejemplo de hombre trabajador, noble, perfeccionista y exigente forjaron en mi lo que reconozco como mi carácter y, si bien mucho me parezco a él, también me distingo en aquello que le costaba trabajo, por ejemplo, la paciencia. Es innegable que le heredé sus canas y desde temprana edad a pesar del poco cabello que me queda, le supero en estatura y los dedos de mis manos son exactos a los de él.

De mi padre aprendí que el éxito se define como la satisfacción del deber cumplido y que los grandes logros resultan cuando das tu mejor esfuerzo. Sé que hubiera disfrutado enormemente las grandes transformaciones de nuestra ciudad en la última década, así como también sé que se sentiría orgulloso de verme como parte de ese equipo de servidores que ha contribuido con ello. ¡Feliz Dia del Padre en el cielo querido Papá!

*Administrador de empresas, especialista en Planeación estratégica urbana, Negociación y relaciones internacionales y Gerencia pública y gobernanza, entre otros. Actualmente es consultor corporativo en asuntos de estrategia, gobierno corporativo y tránsito y transporte hace una bella semblanza de su padre.

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