Vladimir Mijailovich Komarov fue el primer muerto de la carrera espacial. Este acontecimiento ocurrió un 24 de abril de 1967. A la nave Soyuz I no se le abrieron los paracaídas y se estrelló a más de 200 kilómetros por hora contra el suelo ruso; me imagino la desesperación del astronauta ruso, la impotencia cuando se dio cuenta de las fallas tecnológicas y la desesperación que sintió, no quiesiera estar nunca en su pellejo.
Y lo más triste es el silencio de Moscú y ,además, nunca se supo las causas del accidente. Fue una catástrofe tan grande que durante muchos años nunca dijeron las causas del accidente no por la magnitud del desastre, sino por lo ineptos que fueron, y la cadena de errores que cometieron para llegar a este accidente. Los paracaídas no se abrieron, los retro cohetes no funcionaron que serían como los frenos, cayó en cambio a la tierra a una velocidad de más 200 a kilómetros por hora y se fundió con el suelo ruso; falleció un gran astronauta de apenas 40 años, con un gran futuro en la carera espacial.
Lo más triste es que todos sabían que no era la mejor nave. Ya en el espacio, la nave empezó a presentar los problemas que se habían anticipado. No tuvo energía eléctrica, problemas en las antenas. Cada minuto que pasaba aumentaba aumentaba el peligro y las chances de supervivencia de Komarov.
En la Soyuz I no funcionó nunca nada, lo más increíble es que el piloto suplente era yuri Galgarin, un héroe nacional. Las malas lenguas dicen que Yuri era el titular, pero Komarov a sabiendas de todo el problema de la nave decidió ser el titular.
Lastimosamente su gran esposa Valentina y sus dos hijos Yevgeny e Irina quedarían solos con un héroe muerto y calcinado.
Todo esto por una batalla contra los EEUU por ganar la carrera espacial, la urgencia de la URSS por igualar a los EEUU que les llevaban cierta ventaja a los rusos. Lo más triste es que Komarov tenía muy malos presentimientos con la misión, más que con la misión con la nave en si; realmente parecía una nave no ideal, los cuatro ensayos no tripulados habían sido un desastre, los mismo técnicos lo decían, entonces ¿por qué este piloto tan audaz, inteligente, experimentado, se atrevió a colar en esta nave con todos estos inconvenientes?
Esa es la pregunta del millón, ¿por qué los rusos guardaron tanto silencio por tantos años? ¡cero comentarios!
En fin, son dudas que nos quedan en el resto de la humanidad porqué actúan así ciertos países, sin tener la más mínima consideración y después un contentillo de héroe para la familia y el pueblo. ¡Qué Tristeza!!