Estos huevos envueltos en carne molina, es una forma práctica y deliciosa para atender visitas o compartir en la mesa familiar.
Dios mío, qué no haríamos con un huevito. Un huevito, es uno de los regalos más maravillosos del mundo de la creación. Si existiera una campaña, en donde todos los días le diéramos al desayuno un huevito a un niño de todas nuestras escuelas, estos niños crecerían saludables y felices.
El huevo de gallina es un alimento que se puede comer de mil maneras y para miles de recetas, de sal o de dulce. Crudo, cocido, asado, batido, es perfecto para los niños recién nacidos o para los adultos.
Es proteína pura, fuente de vitaminas A,D,E, minerales, ácido fólico, fósforo, hierro y zinc.
Cocinar y hacer recetas con huevos es fácil, pero también hay que tener en cuenta ciertos secretos: para saber si un huevo es fresco, póngalo en un vaso con agua, si el huevo flota es viejo y si se va al fondo es fresco; no separe nunca las claras de las yemas con la propia cáscara del huevo; no lave los huevos antes de guardarlos, pongalos en un lugar fresco, nunca en congelación.
Las virtudes de un huevo en el tema de la cosmética son infinitas desde hace miles de años. En la antigüedad, las mujeres utilizaban la clara del huevo para tensionar un poco su piel, esto quiere decir que les disimulaba las arrugas por largo rato.
La receta que les tengo para esta semana de mucho calor, es para que la compartan en tarde de amigos. Es fácil, sabrosa y con ingredientes a la mano. Ustedes saben que me gusta la cocina práctica, saludable y económica.
RECETA
INGREDIENTES
4 – huevos
150 gramos de carne molida
1/2 cucharadita de tomillo fresco
1/2 cucharadita de orégano fresco
1/4 cucharadita de ajo en polvo
1 – manzana verde rallada
1 –huevo batido
Migas de pan – harina – aceite – sal – pimienta
PREPARACIÓN
Lo primero es poner a cocinar los huevos en el agua hirviendo por unos 8 minutos. Luego enfriarlos bajo el chorro de agua fría, los pelamos y los dejamos que se enfríen. En un recipiente aparte ponemos la carne molida y le agregamos el tomillo, el orégano, el ajo, la sal y la pimienta. Mezclamos muy bien. Vamos cogiendo porciones que aplastamos en la palma de nuestra mano, cogemos un huevo y lo cubrimos con esta mezcla que nos quede una bolita. La pasamos uno a uno igual, por la harina primero, luego por el huevo batido y luego con las migas de pan. Todo esto muy suavecito. Tenemos lista la sartén con el aceite caliente y vamos poniéndolos a freír. Son una delicia.
NOTA: Si van a compartir esta receta como tarde de amigos….pega con unas papas y muchas cervezas.