La variante ómicron es ahora la cepa de coronavirus dominante en los EEUU y Europa, mientras la organización mundial de la salud, OMS, pide más refuerzos para garantizar el fin de la pandemia el próximo año. La nueva variante es de rápida propagación, lo que llevó a algunos países a tomar medidas drásticas (nuevamente la restricción) cuando ya todos pensábamos que se estaba controlando las cifras de contagio y decesos.
En algunos países de Europa entraron en un nuevo confinamiento, cancelaron celebraciones de Año Nuevo; Alemania endurecerá las restricciones sanitarias, Israel prohibió viajes a varios países europeos por el riesgo de contagio, y en Colombia nuevamente nos estamos durmiendo. Cuantos muertos faltan para entender que esto es algo real y grave, mi mente no alcanza a entender cómo es posible que exista una parte de la población que no se quiera vacunar, !Dios Mío¡ Porque la ignorancia es tan atrevida, y además salen sin tapaboca, cuál Superman.
De acuerdo con las autoridades sanitarias Ómicron podría convertirse en la variante dominante a mediados de enero en la unión europea y EEUU, aún no hay certeza exacta de que tanto protegen las vacunas contra la variante ómicron; las investigaciones y resultados lo dirán con el tiempo. De esta variante B.1.1.529 conocida como Ómicron, poco se conoce hasta el momento. Sin embargo, se puede decir que esta variante tiene propiedades biológicas, entre ellas, más de 30 mutaciones en la espiga que podrían conferir mayor transmisibilidad. Sin embargo, sobre esta variante hay más preguntas que certezas. Lo que sí se sabe es que las vacunas no son las únicas, pero sin duda, son la mejor herramienta para combatirlas. Es importante tener mayor vigilancia epidemiológica, genómica, rastreo de contactos, identificación de casos sospechosos en viajeros provenientes de EEUU, Europa y del sur de África, y por supuesto de todos aquellos países donde la Ómicron se instaló.
Hago un llamado a la prudencia, a la racionalidad, se acerca el Carnaval de Barranquilla, hay que tener un equilibrio entre el principio de precaución, la racionalidad científica y la economía. Es claro que con la vacunación no solo combatimos las variantes existentes, sino que reducimos el riesgo de que aparezcan nuevas variantes. Nos espera un futuro incierto con este virus; recodemos que el virus de la Influenza tiene mucha variante, cada año salen nuevas vacunas para combatir este virus no tan agresivo, sin embargo, (también produce muertes cada año) este coronavirus será exactamente igual, virus es virus, su reputación no cambia de la noche a la mañana.
Hago un llamado a la autoridad sanitaria, el Ministro de Salud, el Presidente de la República. Ha muerto mucha gente y con gran tristeza lo digo, cada día mueren personas por este virus, hay que ser más agresivo en la prevención, educación, en las medidas de prevención en el aeropuerto, vía de entrada segura de esta variante, en las fiestas de cada región, en estas celebraciones cuando la gente se agrupa y hay mayor contacto intergeneracional y se puede generar un mayor contagio. A la gente le pido que sean ellos mismos los primeros en cuidarse y cuidar a sus padres abuelos, mejor prevenir cuidándolos, que visitarlos en el cementerio, además ya basta de colegas falleciendo por la irresponsabilidad de una parte de la población que por ignorancia, no se colocan el tapaboca, no se vacunan, no les importan las consecuencias de contagiarse y contagiar.
Es grave lo que se avecina, más muertes, colapso sanitario, esta guerra ya está avisada, este 2022 no será como lo esperamos, mientas este virus este rondando y la gente no colabore, y las entidades sanitarias no sean más agresivas, lastimosamente los más beneficiados serán los cementerios.
NO esperemos que nos den órdenes de cuidarnos, tenemos que hacerlos por racionalidad, porque somos seres pensantes, por simple actitud de vida, por nuestra familia, por los médicos, en fin porque somos una sociedad y así debemos pensar.
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