Esta barranquillera, nacida en el barrio Carrizal, dice que la tendencia para fin de año serán los colores neón. Ella asesora desde los accesorios hasta el look final.
Rosalía Ramírez Carrillo cuenta que era de esas niñas que cuando bajaba al Centro de Barranquilla junto a su mamá, Marlene Carrillo, siempre se detenía a mirar las tendencias en telas y zapatos.
Le gustaba disfrutar de los nuevos colores y de las texturas. “Yo las tocaba para observar qué prenda de zapatos, sandalias o prendas de vestir podían salir de allí”, recuerda hoy esta barranquillera que sigue con esta misma pasión, pero ya como diseñadora empírica.
También asegura que nunca ha dejado de estar al día con las colecciones de los modistos de alta costura en las pasarelas de Nueva York, París y Milán.
“Cuando veo los videos y las imágenes en internet me quedo extasiada con los vestidos, los zapatos, las sandalias y los accesorios”, asegura con una gran emoción.
Ella está orgullosa de dedicarse a este arte convencida que de no podía depender económicamente de su esposo, Gary Javier Sierra, y que podría abrirse campo en el campo del diseño de zapatos, aretes, sombreros y salidas de baño.
Esta mujer de 42 años, nacida en el barrio Carrizal, contó que siempre le ha gustado lucir lo que hace porque ese ha sido el mejor canal de comercialización de su marca Rosalía Accesory (@rosalia_accesorio).
Empezó vendiendo los aretes que elaboraba y luego agregó los zapatos a su línea de productos, que ha logrado vender en la Costa, en otras regiones y en países como Brasil.
El taller lo tiene en una habitación de su casa en la urbanización Montercarlo de Malambo en donde funcionan una máquina y mesa para cortes y pulidoras para suelas y hormas. En la actualidad trabaja con un zapatero y una modista que se encargan de plasmar lo que ella diseña.
Dice que cuando tiene listo un diseño, se toma la foto y la comparte en sus redes sociales, que para ella son muy valiosas a la hora de vender.
“Yo le hago el sueño de todas las mujeres porque ven en internet un diseño de moda, me lo mandan y se los hago. A veces vamos a los almacenes y los precios son inalcanzables. Y yo lo que trato es que luzcan bellas y a la moda”, añade.
Rosalía selecciona la tela y corta sin molde, sino “al ojo”, todo con base a su experiencia, confiesa.
Por eso prefiere trabajar con materiales sintéticos porque no todas tienen la posibilidad de adquirirlos en cuero.
“Me gusta que las clientas tengan acceso a la moda y que se vean elegantes. Todas nos volvemos amigas porque me preguntan cómo combinar el look. Así que no me importa el sol y la lluvia para buscar los materiales en el comercio. Es que yo amo lo que hago”.
Rosalía cuenta que muchas de sus clientas las han llamado de otros países. Como ocurrió recientemente con una jovencita de España.
“Ella me dijo feliz que era más costoso el envío que un par de zapatos tuyos, pero aún así me pidió un top tejido de baño y un par de sandalias verde neón en plataforma de fique. Lo mío es complacer a todas mis clientas para que vuelvan”.
Ahora se prepara para la colección de diciembre, que ella asegura, vendrá con colores fuertes como verde y naranja neón, fucsia y plateados. “Un zapato puede tener hasta 4 colores y se ve hermoso”, añade.
Su proyecto a mediano plazo es tener una tienda física en un un buen punto de Barranquilla porque le gusta que quienes la visiten, salgan con el look completo.
Con toda la experiencia que ha ganado durante años, ahora se alista para ingresar a estudiar diseño de modas en el Sena porque su meta es seguir creciendo para lograr el reconocimiento a nivel nacional y por qué no, asistir a las pasarelas que toda su vida las ha seguido muy de cerca desde niña, cuando iba con su mamá a mirar los almacenes del Centro.
