Entretenimiento / 3 de febrero de 2024

‘We are the world’: Anécdotas detrás de un video que marcó una época

Rosario Borrero

Un documental de Netflix revela detalles de aquella noche de 1985 en la que se reunieron las 45 más grandes estrellas de la música a favor de una noble causa.

La icónica canción We are the world, grabada con fines benéficos el 28 de enero de 1985 por los más grandes artistas del momento, hizo que toda una generación de americanos por primera vez se sintiera parte de un gran rompecabezas llamado América. El tema generaba un enorme sentimiento de hermandad y la plena conciencia de que hacíamos parte de esa gran aldea global en la que las fronteras empezaban a caer por cuenta de la incipiente globalización.

Steve Wonder y Lionel Richie.
Kim Carnes con Michael y La Toya Jackson.

Sin duda, We Are the World fue un éxito rotundo a nivel mundial, una huella cultural que marcó no solo a toda una generación, sino a la historia misma de la música. Por primera vez, los más importantes artistas del pop y el rock deponían sus egos, ajustaban agendas y ponían su talento al servicio de una noble causa, dándose cita en un mismo lugar para grabar una canción con video.

“Los artistas más importantes de nuestra generación unimos todos nuestros egos y todo nuestro talento, para salvar vidas”, recuerda Lionel Richie durante el documental La gran noche del pop, que Netflix acaba de sacar

El tema, escrito por Michael Jackson y Lionel Richie, fue grabado con la finalidad de recaudar fondos para acabar con la hambruna en Etiopía. Fue grabado por un supergrupo formado por 45 estrellas de la música que llevó por nombre ‘USA for Africa’.

Liderados por Quincy Jones, además de Michael Jackson, Stevie Wonder y Lionel Richie, cantaron como solistas Diana Ross, Ray Charles, Kenny Rogers, Tina Turner, Kim Carnes y Cindy Lauper. De igual forma, Bob Dylan, Bruce Springteen, Paul Simon, Billy Joel y Huey Lewis. Mientras que en el coro estaban el actor Dan Aykroyd, Bob Geldof, John Oates, las Pointer Sisters y La Toya, Randy, Jacky, Marlon y Tito Jackson, entre otros.

Todos los beneficios que acumuló el tema fueron donados a una campaña humanitaria por África. La canción fue un éxito en los Estados Unidos: el sencillo vendió 7,5 millones de copias y formó parte del disco que lleva el mismo nombre y que vendió millones de copias en todo el mundo.

La historia comienza con el cantante, productor y compositor Harry Belafonte, quien tuvo la idea de reunir a un buen número de estrellas de la música por un bien común. Si en una misma canción –decía él—participaban cantantes que se solían ubicar en los primeros puestos de las listas, el single iba a ser un éxito. Pero todos tenían que hacerlo sin esperar ningún beneficio económico, porque todo lo recaudado iría a organizaciones que trabajaban para paliar los efectos de la hambruna en África. 

INTIMIDADES DE AQUELLA NOCHE

Ahora, casi cuatro décadas después, aquella grandiosa noche tiene su propio documental en el que se dan a conocer todos los detalles de la grabación. The Greatest Night in Pop (La gran noche del pop), como se llama, da a conocer todos los detalles de la creación y grabación del emblemático tema.

La película dirigida por Bao Nguyen se estrenó en Sundance Festival el pasado 19 de enero, y llegó a la plataforma de streaming Netflix este 29 de enero. Incluye una gran cantidad de imágenes nunca antes vistas de ese momento, que muestran desde las etapas de planificación hasta la sesión de grabación.

La idea de llevar este éxito musical a la pantalla fue del compositor y activista Tom Belafonte, quien lo pudo realizar gracias a la colaboración del manager de la mitad de los músicos estadounidenses que estaban en lo más alto del ranking Billboard: Ken Kragen.

Por lo que se dio a conocer, los compositores, Michael Jackson y Lionel Richie, escribieron la canción la semana anterior a la grabación, en la casa familiar de los Jackson, en Encino. Un detalle no menor es que Stevie Wonder, quien había sido la primera elección, estaba ocupado con una película, aunque pudo llegar para cantar el demo y el clásico.

Luego, los tres intérpretes hicieron una primera grabación en casete y les compartieron las copias a todos los artistas involucrados.

El documental de Netflix muestra que la grabación se realizó con los solistas y el coro, acompañados por músicos en guitarra, batería, teclados, bajo e instrumentos de cuerda. A su vez, como el día de grabación fue la misma noche en que se entregaban los American Music Awards, varios artistas llegaron sobre la hora, pero lo lograron.

Cindy Lauper con Lionel Richie en el preámbulo de la grabación del disco.

En La gran noche del pop, el director Bao Nguyen detalla los esfuerzos que Belafonte, Richie, Jones y Jackson hicieron en nombre de USA for Africa, plataforma creada ad hoc con la firme intención de asistir al pueblo en mitad de la crisis humanitaria.

“DEJEN LOS EGOS EN LA PUERTA”

Tal como Richie explica en el documental, la selección del estudio donde esta banda de superstars grabarían durante toda una noche, situado en Beverly Hills, fue uno de los aspectos más difíciles de todo el proceso: si el lugar donde iban a estar todos esos famosos se filtraba a la prensa antes de tiempo, USA for Africa podría haber sido uno de los mayores fracasos de la industria musical.

Quincy Jones, Michael Jackson y Lionel Richie.

Por supuesto, lo que sucedió fue todo lo contrario: pese a que Prince canceló asistencia en el último momento –al parecer, él y Bob Geldof no se podían ni ver–, el resto de ‘reclutas contra’ el hambre hicieron caso al cartel que Quincy Jones puso en la puerta del estudio («Por favor, dejen sus egos en la puerta») y se comportaron como lo que Lionel Richie les pidió que fueran: los héroes y heroínas que podrían contarle a sus nietos cómo hicieron su parte gracias al poder de la música. 

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