En cuestiones de informes estadísticos, en su turno de gobierno, cada grupo económico y político, los presenta o manipula según sus intereses particulares para vivir en su país ilusorio / oportunista.
Lo que es realidad para quien supervive labrando tierra, cargando piedras, yendo a pie con paciencia y esperanzas de alcanzar lo mínimo vital …
(salud, educación, vivienda, alimentación, trabajo),
Es la realidad manipulada, como máscara hipócrita, por los ambiciosos políticos que usan cifras vacías para justificar que la técnica y la tecnocracia pasen por encima de la humanidad y la cultura. Son modos de corrupción.
Cuando no se actúa con empatía de la necesidad humana en general para gobernar, se actúa con la mezquindad ambiciosa individual y la insubstancialidad del ser.
Quien gobierne debe tener conciencia y ser responsable de la belleza de la vida y sus necesidades.
Desde 120 años atrás todo período de gobierno colombiano se basa en el aprovechamiento oportunista de la gestión del dinero público para intereses individuales más que para la mejoría del desarrollo de las capacidades y la calidad de vida de toda la poblacion.
No se ha logrado crear un grupo social generoso porque la generosidad requiere un esfuerzo constante y una disposición a compartir recursos y tiempo con los demás, y la presión social de clases, linajes, grupos étnicos, y empresarios desde la competencia por los recursos territoriales interfiere en la generosidad grupal (Ni lo emocional, ni lo cultural, ni lo patrimonial, ni lo humanístico común entra en el desarrollo de políticas sociales.) y nosotros seguimos haciendo teatro.
En “c”olombia cuando a unos pocos les va bien a millares les va muy mal, esa es una estadística real, tangible y comprobable al ver la gente durmiendo en las calles de las ciudades, cuando caminamos por las tierras ensangrentadas, áridas y resquebrajadas que han dejado los enfrentamientos rurales o escuchamos de primera mano las historias de vida que les ha tocado llevar a cuestas a tus cercanos, vecinos y amigos.
Y nosotros seguimos haciendo teatro.
Hacemos teatro para mitigar tanta incomodidad y revolcar el pensamiento desde el sentimiento poético para la reflexión y eso no está cuantificado ni cualificado por políticas de estado.
“Que las encuestas y las estadísticas no influyan en tus acciones, algo importante de tener en cuenta.”
@eldelteatro