Dos jóvenes emprendedoras innovan con diseños y singulares estampados con imágenes de las vírgenes en su marca de prendas para dormir Bendita 10:20.

Las sincelejanas Vanessa Reyes y Leda Cantillo se consideran mujeres bendecidas. Y tienen razón, pues desde que comenzaron a soñar con crear una marca de pijamas, poco a poco se les fue abriendo el camino hasta lograr hoy, cinco años después, posicionarse en el mercado nacional con Bendita 10:22.

Vanessa, especialista en gerencia de marketing, es la directora creativa; y Leda, ingeniera industrial y también especializada en gerencia de mercadeo, dirige la producción de la empresa.

Además de los modernos diseños, lo que hace distinta a estas prendas para dormir es su sacra estampación en las que predominan imágenes de vírgenes como la de Fátima, Milagrosa, Guadalupe, de Lourdes, entre otras.  “Nuestro producto se convierte en un lienzo para enviar un mensaje a las personas, eso lo hace diferente”, dice Vanessa, quien explica que el nombre de la marca fue inspirado en el proverbio “la bendición del Señor es el que enriquece”,

Para estas primas y empresarias, cuyo negocio opera en Montería (Córdoba)  “la iconografía religiosa que utilizamos es inspiradora. Porque cuando nació la marca elaboramos diferentes líneas y con un solo tono, pero cuando la hicimos con una estampación, en ese momento fue en agradecimiento a muchos favores recibidos a través de la intersección de la virgen. Por eso a la primera colección la llamamos Llena eres de gracia”.

Con la aparición de Bendita 10:22, atrás quedó el concepto que se tenía de la pijama como única prenda básica para dormir. La marca  las presenta en diferentes diseños, con un toque mucho más fashion.

“Estas pijamas son para estar vestida dentro y fuera de la cama. Antes se tenía la costumbre de ponerse la ropa más viejita o fresca para irse a dormir, pero cuando llegaba la visita o el mensajero la persona tenía que salir corriendo a cambiarse. Ya no. Este problema está solucionado con nuestros productos”, coinciden en opinar las dos jóvenes emprendedoras.

Explican que desde que concibieron el negocio tenían muy claro que no fuera netamente religioso, sino de carácter social. Que más que productos textiles, brindara a todas las personas una forma de ver la vida y que no siguiera una tendencia específica en el universo de la moda.

“Bendita 10:22 fue creada para bendecir. Nos movió la curiosidad de explorar texturas existentes, algunas utilizadas en ropa exterior, pero aplicándolas a un nuevo concepto. Ese mismo que queríamos dar a conocer a todos en el mundo de las pijamas, logrando como resultado una prenda acorde para ser utilizada en diferentes momentos y lugares”, dicen.

La definen como “versátil porque la persona puede salir a la calle, sentirse fresca y bien vestida. Hay diseños variados, desde conjuntos de pantalón o shorts, batas y túnicas muy sexy. Para nosotras lo importante es la comodidad, sin que la pijama pierda su sentido”.

EL 80% del producto está confeccionado en algodón y hay una línea en satín, tipo kimonos, que la hacen sobre pedidos. Pero también ofrecen ropa en materiales antifluidos para personal de la salud, gorros, tapabocas y hasta marroquinería.

Reconocen que como emprendimiento al comienzo no tenían un buen porcentaje de ganancias, pero desde el año pasado el crecimiento ha sido notorio, gracias a su página web y el canal de comercialización en varias ciudades de Colombia, a través de 13 distribuidoras que ellas llaman ‘embajadoras’. En Barranquilla una de ellas es Alma Patricia Noriega.

El encerramiento del que hemos sido obligados desde que apareció inesperadamente la pandemia, ha contribuido a que las ventas se les incrementen vía internet. Ha sido, como se llama su reciente colección: ¡milagrosa!