La psicóloga barranquillera Helda Marino, habla de la labor que realiza la Oficina de la Mujer, Equidad y Género del Distrito, que ella dirige. “Cuando ellas dicen NO es para que las respeten”.  

Atender denuncias sobre violencia y discriminación de género, sobre la desigualdad en el reparto de tareas de la pareja en el ámbito doméstico, hacer prevención y promover el respeto a la diversidad son algunas de las acciones que viene realizando la Oficina de la Mujer, Equidad y Género del Distrito de Barranquilla para responder las necesidades prioritarias de las mujeres con el fin de proteger sus derechos.

Helda Marino Mendoza, psicóloga con vasta experiencia, como jefe de dicha Oficina dice que “a través del trabajo que realizamos, brindándoles asesoría, atención psicosocial y psicológica, orientación jurídica y primeros auxilios, contribuimos a mejorar las condiciones de vida de la mujer, de su entorno y a empoderarlas.”

Reconoce que la incorporación de las mujeres al mercado de trabajo ha aumentado considerablemente en las últimas décadas, pero ese aumento no ha sido suficiente para salvar la distancia que existe entre la tasa de actividad de mujeres y la de hombres. Aunque mundialmente sigue existiendo una clara brecha de género en la participación en el empleo, para Marino es necesario concienciar el principio de igualdad de remuneración para un trabajo de igual valor, entre otras necesidades, para que haya equidad salarial en Colombia. “Nosotros seguiremos manteniendo el compromiso de promover los derechos de las mujeres”.

En cuanto a la violencia de género explicó que la Oficina tiene un programa especial. “Trabajamos en forma integral de varias maneras. Una, es vía telefónica. Algunas veces las solicitantes se comunican con la psicóloga, trabajador social o jurídico, dependiendo el caso, solicitando el apoyo. Esto lo hacemos para disminuir esas barreras de acceso de la solicitante. Es una forma de facilitarle la movilidad”.

“Un personal idóneo les ofrece asesoría y orientación psicológica a las que han sufrido violencia, y cuando algunas llegan en estado emocional le brindamos estabilización.” 

De acuerdo con la funcionaria “la Oficina de la Mujer, situada en el segundo piso de la Alcaldía, donde reciben a las solicitantes, también va a los barrio. “Contamos con una unidad móvil de atención. Nos trasladamos a las diferentes localidades, llevamos el servicio de atención. Hacemos como una especie de feria de servicios a la que nos unimos con Prosalud, Comisaría de Familia y Cruz Roja, entre otras entidades. Un equipo de profesionales se encarga de identificación y monitoreo de violencia de género en los barrio”, anotó Helda, quien aspira que la Casa Refugio, que permanece cerrada, reabra pronto sus puertas para recibir a mujeres víctimas de violencia que están en alto riesgo y luego de un proceso de desarrollo puedan volver a sus hogares.

Sobre la Casa Refugio, la primera dama Katia Nule, anunció en el Día Internacional de la Mujer, que ya se hizo un convenio para que en ese espacio, en el que se trabajará en coordinación con la Oficina Distrital, la población femenina tenga un lugar digno para aquellas que sufren cualquier tipo de violencia.

Según la psicóloga barranquillera otros de los objetivos de la Oficina es seguir trabajando con las escuelas, sobre todo para prevenir la violencia. “Para que los jóvenes entiendan que la violencia no debe normalizarse. Con los estudiantes trabajamos proyectos de vida, sobre todo en la escogencia de pareja, que no se unan a temprana edad. Trabajamos también sobre  los mitos en cuanto a sexualidad, para que conozcan más sobre métodos anticonceptivos”.

EXITOSA CAMPAÑA

En el Carnaval de Barranquilla de este 2024, la Oficina de la Mujer llevó a cabo la campaña ‘NO es NO’ para instar a la población a actuar contra las violencias sexuales durante las fiestas. 

Tuvo como principal objetivo sensibilizar a la ciudadanía frente  la desnaturalización de conductas sociales y culturales que afectan a las mujeres y son justificadas en el  Carnaval como el acoso sexual callejero, los piropos, tocamientos y la violencia sexual simbólica.

“A través de esa campaña, que tuvo un alto impacto en diversas comunidades y barrios de Barranquilla, tomamos frases que representaron esas conductas y las contrarrestamos con mensajes disruptivos desde el sentir de las mujeres donde resaltamos al consentimiento como elemento fundamental para evitar cualquier acto de violencia».

MIRADA AL SEXO OPUESTO

El tema masculino también lo toca Helda en la gestión que viene adelantando.

Opina que en el reparto de tareas de la pareja en el ámbito doméstico de la mujer también debe ser equitativo. El machismo y los estereotipos de género presentes en la sociedad son una de las principales razones por las que las mujeres siguen enfrentando un trato desigual.

Por eso el proyecto de Masculinidad Positiva de la Oficina de la Mujer, Equidad y Género, va por buen camino. “La finalidad es que los hombres sean mejores padres, que no sea solamente la mujer que se encargue de todo en el hogar”, apunta.

Por último señaló que las mujeres deben tener más conocimiento sobre lo que es la diversidad, de ser mujer y desarrollarse a través de esa diversidad.

“Las mujeres no deben normalizar la violencia. He tenido muchos casos, de casadas que han sido violadas dentro de su relación de pareja. Cuando las mujeres dicen NO, también es para que las respeten. Es que las mujeres somos poderosas,  (como dice la campaña que impulsa Katya Nule, esposa del alcalde Char) porque somos transformadoras, que le apostamos al progreso y al desarrollo de la ciudad y el país”.