La Buena Sazón / 10 de octubre de 2020

La creatividad visual en la cocina

Estas lonjas de salmón bañadas en salsa de mostaza a cualquiera se le abre el apetito. Aquí le indicamos cómo hacer el delicioso y atractivo plato.

Carmen Vásquez

La vida no volverá a la normalidad de antes, al menos por un tiempo que todavía no sabemos.

El tener que acostumbrarnos a tener un «sello textil» en nuestro rostro que de entrada nos quitó una de las virtudes naturales en el ser humano «el sonreír», limitarnos a que nuestros cuerpos se vean a la distancia ya es algo que ha generado muchas inquietudes en nuestra mente.

¿Qué hay que hacer? Puede que entre todos hagamos una larga lista de novedades. Pero en este nuevo estilo de vida he descubierto que la «creatividad visual» es fundamental en estos momentos.

Y en el arte de la cocina se puede multiplicar a millones de momentos. Por ejemplo, cómo servimos nuestros alimentos, la elegancia, el color, las formas de nuestros platos. Para los orientales, uno de los aspectos más importantes en los alimentos es el «equilibrio visual» de cómo servirlos. Además que llevar el plato ya servido a nuestros invitados es de fina etiqueta. Es demostrar que esa invitación se hizo con todos los detalles. Recuerde…hoy día las invitaciones son para un reducido número de amigos. Tenga en cada puesto una «bolsita curiosa» para que cada uno guarde su tapaboca y lo ponga  sobre sus piernas, este es un detalle que hay que tener en cuenta en este cambio de vida social.

De aquí mi exquisita y elegante receta de hoy, además de ser muy fácil de preparar.

RECETA: UN RECUERDO DE SUECIA

Miren la belleza de plato y el maravilloso equilibrio de este Gravad lax de la fría tierra de Suecia.

Aquí aprendemos a curar esas lonjas de salmón que se consiguen fácil en el supermercado.

INGREDIENTES

2     paquetes de lonjas de salmón

1/2  taza de azúcar

1/2  taza de sal

   manojo de eneldo picado

   cucharadita de pimienta blanca machacada.

PARA LA SALSA

2   cucharadas de mostaza suave

 cucharadita de mostaza de Dijon

 cucharadas de azúcar

1   cucharadita de vinagre de vino tinto

 cucharaditas de aceite corriente – no de oliva

Sal, pimienta blanca,  y eneldo picado.

Para curar las lonjas de salmón, mezcle la sal, el azúcar, la pimienta y el eneldo y unte las lonjas, póngalas sobre una bandeja y déjelas de 2 a 3 horas y luego métalas en el refrigerador por otras 3 horas. Sáquelas, lávelas y cuélelas suavemente con papel de cocina. Para la salsa: mezcle la mostaza, el azúcar, el vinagre, la sal y la pimienta molida.

Luego hay que batir la mezcla vigorosamente, poniendo al mismo tiempo el aceite en un chorrito delgado y cuando ya esta salsa esté suavemente consistente, póngale el eneldo picado y revuelva. Se sirve con una papas cocidas al vapor untadas de una cucharadita de mantequilla y una rodaja de limón. La ramita de eneldo le da equilibrio de color.

En cada plato ponga dos lonjas de salmón.

NOTA: Hay unas lonjas de salmón que ya se consiguen curadas.

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