Eldiseñador de modas Juan Carlos Obando (JC Obando) entre dos de las muchas estrellas que han lucido sus creaciones: Cindy Crawford y Jane Fonda.
El también fotógrafo profesional se ha destacado por la elegancia de sus creaciones que desde hace varios años hacen presencia constante en las alfombras rojas de Hollywood. Alista a lo grande lo que será su debut en Colombia con un desfile en Barranquilla, donde hará simultáneamente los lanzamientos de su libro y perfume.
Cuando apenas tenía 16 años, Juan Carlos Obando decidió alzar el vuelo de Barranquilla a Estados Unidos en busca de nuevos horizontes. Primero se fue a Nueva York, luego se radicó en Miami y de ahí pasó a Los Ángeles, donde actualmente vive.
Sus inicios fueron como fotógrafo trabajando con Silvia Tcherassi en los lanzamientos de las colecciones de la diseñadora. Estar en esos movimientos de la moda y ser el encargado del backstage y producción de los desfiles, fueron despertando en Obando su gusto por la moda. Al poco tiempo las imágenes captadas por su lente ilustraron el libro que en 2002 Villega Editores publicó sobre la carrera de la creadora barranquillera. Para esa época ya venía con experiencia en calidad de diseñador gráfico, carrera que consolidó cuando laboró en la agencia de publicidad Saatchi & Saatchi como director creativo, por allá en 1998.
Hoy JC Obando, como así se llama su marca, es conocido y respetado en el mundo de la publicidad, la fotografía y el diseño de modas, tres campos que particularmente van de la mano y que no todo profesional desempeña con lujo. Por eso ha sido catalogado como uno de los grandes creadores de su generación y en California es considerado como “uno de sus hijos pródigos de la moda”.
Entre sus proyectos inmediatos está presentar su trabajo en su natal Barranquilla con un gran desfile, y a la vez lanzar su libro y la fragancia que llevará su nombre. “He pensado mucho cómo sería mi entrada a la ciudad que me dio la mejor visión de la moda. Lo quiero hacer a lo grande, porque es lo más justo en retribuirle lo que me dio”, anunció Obando, quien ha laborado para prestigiosas marcas como Ferragamo, la casa de cosméticos Mac y Swarovsky, entre otras.
“LO MÍO NO HA SIDO POR AMBICIÓN”
Durante nuestra entrevista realizada en Barranquilla, donde regresó después de 21 años, JC nos contó que fue en 2008 cuando realmente despegó su carrera. Decidió lanzarse en el diseño de modas debutando en Los Ángeles Fashion Week. Todo gracias a la gurú de la moda Anna Wintour, quien lo llevó a Nueva York.
“Yo ni siquiera sabía quién era ella”, dice entre risas. “La conocí en Los Ángeles en una reunión. Yo en ese tiempo trabajaba en publicidad y apenas estaba metiéndome en ese mundo. Primero conocí a alguien muy cercana a ella y fue cuando me propuso que llevara mi trabajo a Nueva York para que participara en el 10º aniversario de Vogue Fashion Fund, que otorga la CFDA/Vogue”.
Entre 10 participantes, Obando apostó de lleno por su propia firma, una etiqueta que pasa por la renovación de los códigos de la moda norteamericana, convirtiéndose en el primer latino en lograr por mérito propio ese galardón.
De ahí en adelante se le fueron abriendo las puertas, todo fue fluyendo, como dice él. “Es que lo que me ha pasado a mí ha sido interesante. Ni siquiera por ambición, sin pretensión. Por ejemplo, recuerdo el año que estuve con Silvia Tcherassi en Milán, Italia. Allí conocí a las duras de la marca de maquillajes Mac. Nunca mantuvimos una relación comercial, pero jamás pensé que después de tantos años, porque siempre nos mantuvimos en contacto, me fueran a llamar para hacer una colección cápsula en Nueva York para esa firma. Y luego, a través de ellos es cuando me vínculo con la marca Swarovsky, que se convirtió en mi patrocinador para que les diseñara”.
“Lo mismo me pasó para entrar al círculo de las Kardashian. Me hice amigo de la asistente de su asistente y terminé haciéndole el styling. Y después esa persona se convirtió en la mano derecha del rapero multimillonario Kanye West, esposo de Kim Kardashian”.
Sus colecciones se han paseado por las más importantes pasarelas a nivel internacional y alfombras rojas, celebridades del espectáculo han lucido sus creaciones y su trabajo ha sido destacado en importantes periódicos de Estados Unidos y portada de revistas como Vogue.
“Pero mientras los vestidos sutilmente drapeados del diseñador Juan Carlos Obando, se presentaban frente a una pared llena de flores de verano, el diseñador nacido en Colombia demostró que no tienes que ser una superestrella de la pasarela para captar el momento de la moda”, así escribió Suzy Menkes en el New York Times.
“Mi éxito en la moda internacional no ha sido por ambición”
Juan Carlos Obando
En la casi innumerable lista de celebridades que han lucido las creaciones de JC figuran Jane Fonda, Angeline Jolie, Julia Roberts, Cate Blanchett, Rene Zellweger, Emma Stone, Amy Adams, Blake Lively, Jessica Alba, Lili Reinhart, Jennifer Lopez, Miley Cyrus, Bella Hadid, Viola Davis. Frieda Pinto, Gigi Hadid, Beyonce, Solange Knowles, Madonna, Zoe Saldana, Shakira, Kim y Khloe Kardashian, Kendall Jenner, Megan Fox, Camila Alves, Kylie Minogue, Eva Longoria, America Ferrera, Cindy Crawford y Olivia Culpo.
UN DESFILE A LO GRANDE
¿Cómo fue su trabajo en la casa Ferragamo?
-Muy interesante. Por ejemplo, en la Met Gala de 2019, pasarela que permite resaltar el talento artístico de la moda, el trabajo que hice fue algo mucho más técnico. Fue como el alter-ego mío trabajar para esa importante marca italiana. Allí trabajé mucho con prints y pieles. Fue como un contraste, una experiencia diferente y enriquecedora.
¿Cuál es el diseñador mundial que más lo ha influenciado?
–Yo diría que Madame Grés, ese ícono francés que fue considerada como la escultora de moda porque convirtió el vestido femenino en una auténtica obra de arte. Ha sido mi máxima inspiración. Me encanta el manejo que hizo de las telasque hoy se usan, los plisados, drapeados y formas asimétricas que fueron su marca.
¿Cómo define su estilo en la moda?
En todo lo que hemos hecho siempre está el minimalismo. Un minimalismo muy sensual. No me gustan los prints, por ejemplo. Nunca hacemos estampados. Si en el diseño gráfico soy maximalista, en la moda no. Son como dos corrientes que de repente se unen.
¿Sigue con el diseño gráfico y la fotografía?
– Claro. Ahora estoy en el mejor momento. Porque a raíz de la pandemia le dediqué más tiempo al diseño. Con un socio, tengo mi propia oficina en Los Ángeles. En cuanto a la fotografía, estoy reuniendo todo lo que he realizado en ese campo para contar mi historia a través de un libro.
Usted ha presentado colecciones en México, París, Miami, Nueva York, Los Ángeles, entre otros lugares, ¿por qué no lo ha hecho en Colombia?
-Me ha llamado de Colombiamoda y otros importantes eventos de país, pero he dicho no porque no ha llegado el momento. Además, no había podido cuadrar los tiempos.
Su gran debut en Colombia lo hará en Barranquilla ¿cómo lo piensa hacer?
–En Colombia la gran parte de la gente no sabe quién soy y qué hecho, a diferencia de EEUU. Para mí es muy importante que haya un contexto para que la gente pudiera entender qué es lo que estarían viendo en un desfile mío. Porque si no, sería algo efímero. Por eso he pensado en lanzar mi libro al mismo tiempo. Cuando uno pasa por ciertas etapas en la vida, en la carrera, pienso que uno se convierte más que un monólogo en un diálogo. Para mí es importante hacerlo en Barranquilla, no simplemente para decir aquí llegué o llegar con un bastón de oro. Quiero compartir mi experiencia para ayudar a las nuevas generaciones. Para mostrar qué hice en la parte creativa, cómo puedo contribuir con lo que me ha pasado a mí, que sirva de ejemplo a las nuevas generaciones en Barranquilla. Quiero dejar una enseñanza. Mostrar las etapas que he ido superando poco a poco y que conseguir el éxito no ha sido casualidad.
Es decir, usted además de desfile traerá su libro bajo el brazo y el perfume en el bolsillo.
-Totalmente (risas). Ya estamos trabajando en mi propia fragancia.
Por cierto, ¿cómo vio a Barranquilla?
-Aunque me faltó mucho por ver, porque solo estuve unos días, me encontré con otra ciudad más adelantada; quedé maravillado y muy feliz.