Además de sus propiedades nutritivas y farmacológicas, el café tiene otros beneficios alternativos.

Mucho se dice que este producto rico en nutrientes que   ayudan a proteger las células, por ejemplo,  a reducir el riesgo de sufrir una insuficiencia cardíaca, que contribuye a reducir el riesgo de padecer diabetes tipo 2 y de cirrosis, y mejora el estado de ánimo, siempre y cuando se consuma una o tres tazas al día.

Los expertos en nutrición e investigadores del sector médico han descubierto numerosas razones por las que se puede recomendar el café. La mayoría de ellas derivan del hecho de que el café es la principal fuente de antioxidante. Pero lo que muchos desconocen es lo útil que es el poso o residuo de ese producto una vez sea utilizado. ¡No lo deseche! Porque es un excelente fertilizante para las plantas.

El mejor modo de elaboración de un abono pasa por conservar los posos de la infusión en un recipiente ventilado y oscuro, mezclados con una buena cantidad de tierra para jardines interiores, de modo que los posos fermenten y se descompongan enriqueciendo la tierra. 

Los desechos del café son ligeramente abrasivos. Por eso, son especialmente útiles para limpiar restos pegados en sartenes, bandejas y otros utensilios de cocina. Un poco de café molido y un estropajo es suficiente para dejar todo el menaje de cocina limpio y reluciente.

Elimina los malos olores en armarios, basura y neveras, también el olor de ajo y cebolla en las manos, ahuyenta hormigas y otros insectos, consigue un cabello brillante y se utiliza para tinte en el cabello.  pintura natural.