Vida Cultural / 24 de agosto de 2024

«Falta formación y motivación para que el público asista a eventos culturales»

Parque Cultural del Caribe.

Miguel Utria

Gestores culturales opinan del anuncio del Distrito de Barranquilla sobre las inversiones que se harán para la terminación de Museo de Arte Moderno ubicado en el Parque Cultural del Caribe.

Quienes conocen el tema cultural en Barranquilla recuerdan una época de suma importancia para la ciudad en cuanto al aporte que la misma le ha dado a las manifestaciones artísticas y folclóricas diferentes Carnaval.

En conversaciones que hemos tenido con artistas y gestores en otros espacios de esta revista, siempre han destacado la falta de entusiasmo tanto de parte de las autoridades como de la ciudadanía en materia cultural, y que los eventos que se dan aquí son frecuentados por las mismas personas de siempre.

Museo de Arte Moderno de Barranquilla (Mambq), que se levanta en el Centro Histórico de la ciudad.

Lo anterior motiva a estos gestores a sugerir, y lo hemos destacado en  nuestras publicaciones, que se hace necesario que en Barraquilla no solo se invierta en eventos de tipo cultural, en adecuar o recuperar espacios para el fomento de manifestaciones culturales y en apoyar a los artistas, sino en formar público para la cultura.

En algunos espacios se afirma que la parte cultural de la ciudad se ha quedado solo en lo que se muestra del Carnaval cada un año, y en unas cuantas presentaciones de obras de teatro, festivales de danza y otras manifestaciones, pero que son poco difundidas y por tanto con falta de público.

El gestor, historiador e investigador Moisés Pineda, sostiene que si bien existen personas que se mueven durante el año en materia de eventos culturales, hace falta mucha promoción de dichas actividades, pero además, y hace énfasis en ello, falta público con formación para asistir a dichos eventos, que se sienta identificado con esas manifestaciones y que tras su participación, queden con ganas de volver a ver una puesta en escena de uno de estos eventos.

El también gestor de la cultura Álvaro Suescún afirma por su parte que los espacios para el disfrute de la cultura en la ciudad ha decaído por causa del olvido o poco interés en el mismo, tanto de la autoridad, como de la ciudadanía.

Álvaro Suescún.
Moisés Pineda Salazar.

ESPACIOS PARA LA CULTURA

El tema cobra relevancia a propósito de lo informado por el Distrito en el sentido que se harán inversiones en la terminación de la anunciada sede del Museo de Arte Moderno de Barranquilla, en el Parque Cultural del Caribe, que fuera de gran importancia para eventos culturales, y que el olvido o falta de interés ocasionaran su deterioro, según el pensamiento de los trabajadores de la Cultura.

Sobre el concepto de que a la ciudad le faltan escenarios para la cultura, Moisés Pineda dice apartarse de ese concepto porque, como lo ha dicho en anteriores ocasiones, aquí sí hay espacios para la puesta en escena de eventos que promuevan estas manifestaciones, pero no hay público formado para ello.

ESCENARIOS SÍ HAY

“Escenarios yo creo que hay suficientes, grandes, pequeños, bonitos no tan bonitos, pero sí los hay, de todo tipo, y la mayoría del sector oficial. Pero se tropiezan con el tema de la falta de público, porque ni el Distrito, ni el Departamento, ni los Municipios forman público para el arte. No se está formando a los niños para que les llegue a gustar el teatro, la música, la pintura,  la poesía y demás artes”, afirma Pineda Salazar.

Exposición inmersiva sobre Vicent Van Gogh en 2023.

Sobre el Museo de Arte Moderno de Barranquilla, afirma que debe partirse de un análisis sobre si hay público para el arte moderno. Y en ese sentido asegura que sí lo hay, pero se da la tendencia de llamarle arte moderno a cualquier manifestación existente.

Lo anterior, indica el profesor Pineda, es por falta de conocimiento, y asegura que en ese sentido hace falta una curaduría para el Museo de Arte Moderno, justamente para establecer si se cumple con el cometido que implica el término. Pero el además haría falta tener un inventario de obras de arte, cuáles son, dónde están, cómo están catalogadas, cuál es su costo, si hay quien avale su autenticidad, si están guardadas en el lugar adecuado y bajo qué figura, y si están aseguradas en caso de pérdida o deterioro de la misma. “¿Quién tiene esa información?, se pregunta Pineda.

Ante estos interrogantes el profesor Pineda afirma que se está haciendo un edificio, que a algunos les gusta, a otros no, pero además hay que preguntarse cómo se llega a él, cómo se va a intervenir el entorno urbano de tal manera que el museo tenga público, que ese público tenga cómo llegar y haya una oferta que invite a volver, además de unas colecciones de obras que llamen la atención.

IMPULSOR DE CULTURA

El gestor cultural Álvaro Suescún recuerda que el Parque Cultural se habían convertido en el gran animador de los eventos de reconstrucción y rescate del patrimonio folclórico de Barranquilla, el Atlántico y la Región Caribe, con la presentación, en su parte externa, de grupos de baile y cantos propios de las riberas del Magdalena muchos de los cuales revivieron gracias a esa promoción, y destaca que la sede Museo de Arte Moderno se levante en ese complejo.

“Esos grupos ribereños llegaron, se presentaron y nos permitieron constatar que el Carnaval de Barranquilla provenía de esas danzas ribereñas que estaban instaladas frente al río”, apunta Suescún.

Suescún se aproxima al concepto de Pineda en el sentido que si bien se nos anuncian inversiones en el edificio sede del MAM, y que ello sería de gran importancia para la retoma eventos artísticos y culturales, es necesario que también se intervenga el entorno del parque que ha sido tomado por ventas satélites, así como “especies nocturnas” que se exhiben en la vía principal de esta esquina del distrito central de la ciudad.

Foto de archivo sobre un espectáculo de narración oral en el Parque Cultural del Caribe.

Pero además –agrega- la esquina se ha convertido en una estación de buses y punto para otras actividades que alejarían a quienes quisieran llegar a apreciar un evento cultural que allí se programe.

Afirma que de llegarse a concretar la terminación de esas obras del edificio sería fundamental para la recuperación del Parque Culural del Caribe, un lugar que es necesario para  la ciudad de Barranquilla y su enfoque cultural.

“Yo recuerdo las graderías de la parte externa donde la gente se sentaba a observar eventos o simplemente a pasar un rato agradable en una tarde de sábado o domingo tras visitar el parque. Soy optimista, pero también realista, y tengo de recordar que este no es el único anuncio que se ha hecho de intervención y recuperación de dicho lugar”.

Y recordó que entre los meses de marzo y mayo ya se había hecho un anuncio en tal sentido, cuando además se anunciaron recursos a invertir y disposición de avanzar pronto en dicha recuperación.

El nuevo proyecto de la Administración contempla la segunda etapa de la construcción de dicha sede, y a propósito de la fecha a la que se refiere Suescún, el alcalde había anunciado, en ese entonces,  inversiones cercanas a los 20 mil millones de pesos con recursos propios.

MÁS OFERTA

Moisés Pineda agregó que a este tipo de espacios les hace falta una oferta articulada con experiencias que permitan a la gente circular por los mismos y encuentren diferentes actividades, o al menos valores agregados que le inviten a permanecer en el mismo.

“De toda esta mole de cosas que hay en Barranquilla, ¿cómo se convence al padre de familia para que lleve a sus hijos ahí durante las vacaciones? Pero además ¿a la gente qué le queda? ¿Le quedan ganas de volver? Y si vuelve ¿qué encuentra de nuevo? ¿Cómo estamos administrando estas cosas, cómo estamos satisfaciendo la novedad en el público y el deseo de tener nuevas experiencias y servicios adicionales?”, se cuestionó Pineda refiriéndose a los servicios de galerías, museos, teatros o bibliotecas en la ciudad y a las ofertas de dichos espacios durante el año.

Indica Moisés Pineda que los niños aprenden a amar el arte e interesarse por él, llevándolos a exposiciones de pintura, pero enseñándole dibujo a familiarizarse con las pinturas, los pinceles; enseñándoles a escuchar y apreciar música selecta y culta, pero también a tocar instrumento; llevándoles al teatro, pero motivarlos a actuar en obras de teatro, y eso se enseña desde la escuela y durante toda la etapa de aprendizaje.

“La única manera de que al hombre se le eduque y transforma es haciéndolos interactuar con esas cosas. Si no educamos a los niños en cultura, los únicos que van a ir a las exposiciones, conciertos y obras de teatro son quienes lo hacen, y eso lo estamos viendo. Y es porque son quienes lo entienden, el resto del mundo no lo entienden. Se necesitan instructores de teatro, instructores de música, profesores de cultura y arte en las escuelas y colegios”.

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