Truffles es además modelo de los lentes de la óptica de su humana adoptiva.
Truffles, como se llama la minina, fue adoptada por la propietaria de una óptica en Pensilvania, EEUU. Es la sensación en redes sociales.
La historia de la minina ya es viral en redes sociales, y se ha convertido en toda una “personaje” que llama la atención y ha ayudado a incrementar la clientela de la clínica.
Truffles, una gata callejera adoptada por la propietaria de una clínica oftalmológica infantil, se ha vuelto la sensación de la clientela del negocio, pues con su presencia y algunas maniobras enseñadas por la dueña entretiene a los pequeños mientras son atendidos.
El caso se da en Pensilvania, Estados Unidos, en la clínica Child’s Eyes de Mechanicsburg, propiedad de Danielle Crull.
La mascota contribuye a la relajación de los niños mientras son atendidos, especialmente cuando les toca medirse y escoger los anteojos recetados, un detalle que para muchos infantes puede resultar por lo menos fastidioso.
La “madre adoptiva” de Truffles le ha enseñado trucos como chocar la palma de la mano y dar las gracias, lo que es bien acogido por los niños y sus acompañantes adultos.
El primer truco que aprendió Truffles de su propietaria fue aceptar el uso de anteojos, que esta lo utilizó como gancho publicitario de su clínica.
Luego protagonizó videos para que los niños supieran cómo es un examen de la visión, dónde poner los anteojos cuando no los están utilizando y como utilizar los anteojos adecuados para el exterior.
La peculiar felpuda cuenta con aproximadamente unos 5 años de edad, y la preocupación actual de la propietaria es conseguirle un “novio” que este a su nivel “social”.
