Mundo curioso / 20 de agosto de 2022

¿Por qué la mujer más rica de Asia ha perdido más de la mitad de su fortuna?

Yang Huiyan es heredera de un gran imperio inmobiliario en China. Tomada de Facebook.

Miredvista.co

Según Forbes, Yang Huiyan posee en sus bancos 25.300 millones de dólares, pero últimamente no le ha ido bien en los negocios inmobiliarios de China, su país de origen.

Yang Huiyan es una mujer discreta. No hay muchas fotos de ella. Foto de Facebook.

El mundo de las finanzas ha quedado sorprendido con esta noticia. Yang Huiyan, de solo 41 años, no es solo la mujer con mucho dinero en China, sino que se destaca como la persona que posee una gran fortuna en toda Asia.

Desde que heredó un imperio inmobiliario de su padre hace más de una década, su riqueza no había dejado de aumentar, pero en este 2022 todo ha cambiado por completo hasta el punto que ha perdido el 50% de su fortuna estando en números rojos en páginas especializadas.

Según el diario Bloomberg, en 2021, estimaba la fortuna de la empresaria en unos US$33.900 millones, que cayeron a unos US$16.100 millones en las estimaciones de julio pasado.

Yang Huiyan, accionista mayoritario de Country Garden, uno de los mayores grupos inmobiliarios de China

Esto se debe a la crisis que está viviendo la segunda potencia mundial en el mundo inmobiliario debido a la pandemia Covid-19 y la disminución de la demanda por parte de los ciudadanos.

Todo esto es una sumatorio de crisis y reclamos. Los bancos en este país se han quedado sin efectivo, lo que ha provocado protestas en algunas ciudades del país asiático.

En un informe en julio pasado, la agencia de calificación de riesgo S&P estimó que las ventas de propiedades en China podrían caer en un tercio este año debido a las huelgas hipotecarias.

Mientras, Capital Economics, una empresa de investigación económica independiente con sede en Londres, pronosticó que «sin ventas, muchos más desarrolladores colapsarán, lo que es una amenaza financiera y económica» para China.

+ Noticias


Bienvenida la nueva normalidad en los centros comerciales
Un atractivo pomelo
Ser enfermera: más que un oficio es un don de servicio
Cuando llega la menopausia…¡qué sofoco!