El ‘Pesebre en vivo’, que creó y dirigió durante 25 años en Usiacurí, fue una de las obras que más llenaba de orgullo al maestro Tomás Urueta. En la foto, con alguno de los protagonistas.
La coreógrafa Sonia Osorio (Q.P.D) fue quien impulsó a nivel nacional la carrera de este artista nacido en Usiacurí, Atlántico.
La partida de Tomás Urueta De la Hoz, ocurrida el sábado 19 de noviembre, es una gran pérdida para la cultura atlanticense y del país.
Tomás Urueta De la Hoz fue un artesano ‘por accidente’, como nos dijo en una de las tantas entrevistas que le hicimos a lo largo de su carrera. Todo surgió, la vez que pasando por un almacén en Barranquilla vio a unas personas haciendo mal un tejido, y como él nació en Usiacurí viendo a su mamá, que era experta en tejeduría, se acercó para ayudarlos. El resultado no pudo ser mejor. Fue entonces cuando las personas de ese almacén lo recomendaron para hacer unos adornos para una fiesta de Carnaval en el Country Club.
Sonia Osorio (Q.P.D), directora del Ballet de Colombia, apenas vio el talento de Urueta no dudó en pedirle que le hiciera unos tocados a su compañía. Tal como lo reconocía siempre Urueta, fue la coreógrafa quien le dio ‘espectacularidad’ a sus trabajos; “ella hizo que fueran más imponentes”, nos dijo en una ocasión.
De ahí en adelante el maestro comenzó a ser solicitados por diseñadores y casas como Donace´s Shop, Modas Maura, Alfredo Barraza, Amalín de Hazbún y muchos otros, para que les elaborara tocados, accesorios y demás complementos en los trajes de fantasía que lucieron reinas de belleza, capitanas de clubes sociales, comparsas, danzas y soberanas del Carnaval.
“Se nos fue una leyenda del talento y creatividad. Trabajé muchos años con él. Creo que de las 381 reinas que he vestido, por lo menos 170 lucieron adornos hechos en el taller de Tomás”, dijo Alfredo Barraza a MiREDvista.
Recordó que en 214 fue la última vez que tuvo la oportunidad de reunirse con el maestro para que le hiciera varios adornos a los trajes de fantasía de Maqui Diazgranados, reina del Carnaval de ese año.
Urueta fue también soporte vital en los vestuarios de los diseñadores en importantes festivales y ferias nacionales, e igualmente expresó su arte en la elaboración de máscaras para muchas de las danzas del Carnaval de Barranquilla.
Le gustó siempre la docencia, fue profesor de arte dramático, director artístico y hasta hizo un papel de indígena para la película ‘La Misión’ al lado de Robert De Niro.
Hace más de 25 años creó el ‘Pesebre en vivo’ en su natal Usiacurí, un espectáculo anual protagonizado por niños y jóvenes, a quienes no solo dirigía sino que les hacía en su taller todo el vestuario representativo de ese pasaje bíblico.
En noviembre del año pasado, la Gobernación del Atlántico exaltó su labor por 60 años contribuyendo con el arte y la cultura en Usiacurí con ese proyecto tan hermoso como lo es el ‘Pesebre vivo’.
“Lo que nunca me dio la docencia, me lo ha dado mi arte”, había expresado el artista con su habitual sentido del humor.
Al igual que la mayoría de los trabajadores de su taller, su sobrino Luis, que también aprendió el oficio de confeccionar adornos de fantasía, seguirá el legado de quien fue su gran mentor.