Son dos de los trastornos emocionales más comunes, con alta incidencia en Colombia. El primer paso es el diagnóstico con un especialista.

La pandemia del Covid-19 ha traído pérdidas y duelos, no solamente por el fallecimiento de amigos y familiares, sino por la pérdida de empleos y fracasos económicos, lo que ha hecho que se aumente aún más la prevalencia de trastornos mentales.

En opinión de Laura Villamil, especialista en psiquiatría y salud mental, magister en terapia cognitiva conductual y en Nutrición Clínica, quienes padecen este tipo de enfermedades deben tener una adecuada red de apoyo, personas alrededor que entiendan y apoyen al paciente que sufre de depresión o de ansiedad es vital para superar estas dos enfermedades,

“Muchas personas suelen buscar refugio en amigos o familiares, lo que sucede es que esas personas se cansan de escucharlos por ser repetitivos y a veces reciben comentarios destructivos como que no sea débil, pon de tu parte, intenta estar bien y no tienen en cuenta que es una enfermedad que está lejos de la debilidad, debido a que es una patología que se sale de las manos y requiere de un tratamiento médico”, asegura la especialista.

Según cifras oficiales durante el 2020 se registraron 18 mil llamadas a las líneas telefónicas de atención psicológica en Colombia.

Según Medicina Legal, hay una relación directa entre trastornos emocionales y el suicidio; un drama que, a mediados de 2021, dejaba 1.488 víctimas, representando un aumento de 175 casos frente al mismo periodo de 2020.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, OMS, cada año, más de 700.000 personas se quitan la vida, tras otros numerosos intentos, lo que corresponde a una muerte cada 40 segundos.

¿Qué hacer?

Para tratar cualquier enfermedad mental, es muy importante primero tener un diagnóstico adecuado brindado por un psiquiatra, especialista en patologías mentales, para estar seguros de que se trata. Una vez se este seguro que está sufriendo de depresión y/o ansiedad, se debe continuar el manejo con el psiquiatra.

De manera adicional, es clave realizar ciertos exámenes paraclínicos para descartar la organicidad teniendo en cuenta que muchas patologías como el hipotiroidismo podrían estar generando síntomas similares a la depresión y a la ansiedad (sensación de falta de energía, perdida del deseo por ciertas actividades, entre otros).

Por otro lado, se deben cambiar los hábitos de vida, empezar a hacer ejercicio, tener una dieta saludable basada en carbohidratos saludables, grasas saludables y proteínas. Y también, identificar qué factores o pensamientos (sociales, de pareja, laborales, familiares) pueden estar generando el cuadro de ansiedad o depresión y empezar terapia cuando antes para sanar estas situaciones.

Es pertinente aprender a conocerse, evaluar si hay rasgos de la forma de ser que puedan estar generando predisposición a no adaptarse bien a ciertas situaciones y este generando la depresión.

El psiquiatra debe evaluar la necesidad de iniciar un antidepresivo y/o ansiolítico (medicamentos necesarios para mejorar los síntomas ansiosos o los episodios de pánico que se estén presentando).

Es necesario continuar el tratamiento por el tiempo indicado por el especialista en psiquiatría.

Para los especialistas, el objetivo es concientizar a la población de la importancia que tiene la inversión en salud mental a nivel global, sobre todo teniendo en cuenta que la salud mental es el área más desatendida de la salud pública.