Más de 20 restaurantes locales, $16.000 por plato y una semana para elegir al mejor perro caliente.
Del 12 al 20 de julio, las calles de la ciudad se transformarán en un verdadero laboratorio de sabores, aromas y creatividad culinaria gracias a una nueva edición del Gastro Urban Fest, un festival que, en su séptima versión, pone en el centro de la mesa uno de los íconos de la comida rápida: el perro caliente.
Durante ocho días, 20 restaurantes locales desplegarán toda su imaginación para reinventar este clásico callejero y convertirlo en una auténtica obra de arte gastronómica, disponible para todos los paladares a un precio de $16.000.
Desde combinaciones tradicionales que evocan la nostalgia de la esquina del barrio, hasta apuestas gourmet que incorporan ingredientes poco convencionales, cada bocado promete contar una historia de sabor y pasión caribeña.
El Gastro Urban Fest, bajo la batuta de su CEO, Carlos Marín, no es solo un encuentro para amantes de la comida rápida: es, ante todo, un motor para la economía local. Con cada edición, el festival impulsa el talento de chefs emergentes, fortalece la cadena de abastecimiento y genera empleos directos e indirectos en sectores como la producción de alimentos, la logística, el diseño y la comunicación digital.
En palabras de Marín, “este festival nace para celebrar la cultura urbana de nuestras ciudades, pero también para apoyar a quienes con su sazón y esfuerzo dinamizan la economía y construyen identidad gastronómica”.
Nombres como Chulas, Red Guitar, Los Gordales, Forza Italiana, A la Parrilla, La Bacana, Yummy, Costeño Burger, Monster Key, Punto Loco, Q’ Arepa, Brasas y Barriles, La Cocina de Joselo, Marco Brasa y El Gusto Comida Rápida, entre otros, se disputarán el reconocimiento al mejor perro caliente de la ciudad.
Cada uno aportará su sello distintivo y su creatividad para seducir a un público cada vez más exigente, dispuesto a explorar sabores nuevos sin dejar de lado la tradición.
El ganador se elegirá mediante votación popular a través de las redes sociales del Gastro Urban Fest, consolidando así una experiencia interactiva que trasciende lo puramente gastronómico y se convierte en un fenómeno digital, capaz de movilizar comunidades enteras para respaldar a sus favoritos.
Pero la fiesta del perro caliente no se limitará a la ciudad: Cartagena y Santa Marta también serán escenario de esta celebración, llevando la esencia del festival a otros rincones de la Costa Caribe y consolidando una red de emprendimientos gastronómicos que, más allá de competir, colaboran para posicionar la región como referente de innovación y sabor.
El Gastro Urban Fest demuestra que, detrás de cada mordisco, hay mucho más que un simple antojo callejero: hay manos que amasan pan, productores locales que surten insumos, diseñadores que crean afiches, repartidores que conectan la comida con los hogares y una comunidad que se congrega en torno a un mismo propósito: disfrutar y apoyar lo nuestro.
En tiempos donde la economía necesita impulsos creativos, la gastronomía urbana se alza como una industria viva, diversa y resiliente, capaz de reinventarse y de convertir la calle en una vitrina de oportunidades.
Este julio, el perro caliente se viste de gala para recordarnos que la buena comida esa que se comparte entre risas, amigos y familia siempre será un motivo para encontrarnos y celebrar quiénes somos.
Para quienes no quieren perderse detalle, el festival invita a seguir todas las novedades a través de su canal de WhatsApp, manteniéndose informados y listos para votar por el mejor perro caliente del año.
Porque la ciudad se alimenta de sueños, sazón y talento local. Y este Gastro Urban Fest es, sin duda, la mejor prueba de ello.