Para cuidar nuestros talones y evitar grietas son importantes la higiene e hidratación. Hay que usar un jabón suave para limpiar los pies y pasar una lima manual o eléctrica, o una piedra pómez, por todo el talón para retirar la piel muerta.
El talón o calcañal, por ser la parte trasera del pie, tal vez muchos no le ponen atención a su cuidado. La piel de nuestro talones es muy resistente, más gruesa, dado que tiene la función de amortiguar el peso de todo el cuerpo, pero a la vez de lo más sensible, con tendencia a resecarse.
¿Cuántas veces no hemos oído hablar del famoso talón de Aquiles? Es una expresión que se emplea para referirse al punto débil, tal como le sucedió, según la mitología, a ese guerrero que murió por una flecha que le dispararon en esa parte del pie, la más vulnerable del cuerpo.
Aunque pareciera que los talones no están a la vista, es una zona delicada. Cuando vamos a la playa y dejamos los pies al descubierto o queremos estar descalzos por mucho tiempo en casa, más vulnerable se vuelve esta piel. Pueden agrietarse y resecarse lo que provocaría con el tiempo fisuras más profundas que aumentan el riesgo de infección.
Los expertos indican que otras de las causas que producen grietas en los talones son hacer actividad deportiva con calzado inadecuado, usar medias de tela que no sean absorbentes, calzado abierto en el talón o con suela rígida y el sobrepeso o retención de líquidos.
Según las recomendaciones de Mayo Clinic antes de irte a dormir: remoja los pies alrededor de 10 minutos en agua sola o jabonosa y sécalos con golpecitos. Luego, frota suavemente los talones con una esponja vegetal o una escofina para quitar la piel muerta. Aplica una crema más espesa a base de aceite o con vaselina (Vaseline, ungüento curativo Aquaphor u otros), luego colócate un par de medias de algodón finas a la hora de dormir para ayudar a que el humectante haga efecto.
Un remedio casero recomendable
Qué tan a menudo: Repite el tratamiento cada día hasta que tus talones sanen.
Por qué funciona: El Listerine contiene thimol y alcohol, los cuales ayudan para luchar contra el hongo de la uña del pie, cura talones agrietados, suaviza la piel y trata las verrugas plantares. El ácido suave que se encuentra en el vinagre suaviza la piel seca y muerta, haciéndola fácil de exfoliar.