El desfile sin público fue transmitido por redes sociales de la prestigiosa casa francesa. Predominaron las faldas y vestidos largos, estampados, bordados y los corsés de piel.
Fueron necesarios doce días para que la Casa Dior montara la escenografía de sesenta toneladas con 30.000 luces Led que rindió un sentido homenaje a los artesanos del sur de Italia.
La Colección Crucero 2021, un verdadero “milagro”en opinión de Maria Grazia Chiuri, directora de la línea femenina de la prestigiosa marca, recreó las plazas de su país llenas de luces como en las grandes fiestas de la región, pero también, de esperanza en tiempos de pospandemia.
El desfile desde la Piazza del Duomo en Lecce, región de Apulia, estaba previsto para lanzarse en mayo, pero por la crisis del COVID-19, se presentó sin público, algo inédito en la historia de las grandes casas de moda que ya han hecho lo mismo como Valentino y Chanel, para citar dos ejemplos.
La colección fue transmitida por la página web de Christian Dior y de las redes sociales.
Esta vez, la célebre marca francesa le apostó a las faldas y vestidos largos con muchas flores o estampados, pero también mostró transparencias, drapeados, encajes, telas vaqueras y tejidos en los que predominaron lo artesanal y el bordado.
Noventa diseños de alta costura que se pasearon por la emblemática plaza principal de arquitectura barroca, mientras los bailarines locales de la Fundación La Notte della Taranta, dirigidos por Sharon Ella, danzaban casi al ritmo de los modelos.
Una inspiración que evocó los campos italianos con piezas en algodón, lino bordado, seda y lana de oveja, entre otros, y que rescató el romanticismo y la feminidad.