El joven autodidacta es un destacado profesional de las artes visuales en el Caribe colombiano, que creó con unos amigos la Caja de Música Live, la primera productora de conciertos vía streaming.
Bryan Cuadro Britto es un joven de 27 años de edad, soñador, emprendedor, trabajador, luchador, temeroso de Dios, que nació en la capital del Cesar el 17 de septiembre de 1993, bajo el signo Virgo y como buen representante de él, se caracteriza por su precisión, su convencionalidad, su actitud reservada y su afán, a veces hasta la obsesión, con la limpieza. Es, como buen virgo, metódico, estudioso y le gusta la lógica y estar continuamente aprendiendo.
Es el mayor de 3 hermanos en el hogar conformado por Héctor Enrique Cuadro Felizzola, quien actualmente es el jefe de la oficina de control interno del municipio de Valledupar, y Jackeline Britto Larrazábal, ama de casa al 100%.
Es bachiller del afamado colegio Loperena y hoy ha cristalizado su gran sueño de siempre con la conformación de una empresa de marketing digital y productora audiovisual. Desde que salió del colegio, sin decidir aún que quería estudiar, comenzó con la fotografía y los videos, todos de una calidad que asombraba hasta los profesionales. Ese arte iba de la mano al desarrollo de piezas de publicidad y temas digitales. Un primo que estaba trabajando con agrupaciones vallenatas lo invitó a que lo acompañara y desde entonces está matriculado con los mejores del gremio.
Elkin Uribe y Lucas Dangond fueron los primeros en creer en él. Alejandro Palacios, Luifer Cuello, Elder Dayan y Luis Fernando de la Hoz, permitieron que su creatividad se desarrollara. Con Peter Manjarrés ya su trabajo no era sólo la fotografía o el video. Con el artista en su mejor momento, se abre a un campo más amplio como es la producción audiovisual y posicionamiento de imagen, y posteriormente a la producción general en el lanzamiento Mundial en el Parque de la Leyenda Vallenata.
Después hizo parte de la agrupación de Martín Elías y junto a Gonzalo Villalón actuó como productor general del lanzamiento Imparables en el Parque de la Leyenda. Brayan considera que trabajar con Martín ha sido el punto más alto de su labor y que eso lo motivó para abrir su propia empresa. Ha realizado trabajos para la Presidencia de la República, la Gobernación del Cesar y muchos municipios de ese departamento, “sin abandonar a mis músicos”, dice.
Y como él no para, la pandemia sirvió para unirse a unos amigos y darle vida a la Caja de Música Live, los primeros en el país que se atrevieron a producir y vender conciertos vía streaming.
Bryan juega fútbol dos veces por semana y va al gimnasio 5 veces a la semana. Escucha mucho vallenato y latin pop. Es “parrillero” por afición y por su gusto por la carne. De ahí que su plan favorito los fines de semana cuando no está trabajando, es reunirse con su familia y amigos alrededor de un asador, para compartir su gusto por la cocina y conversar informalmente.
A la pregunta ¿cómo te ha tratado la pandemia?, responde reposadamente: “realmente es un cruce inmenso de emociones y sentimientos porque todo esto que aún seguimos viviendo es algo que creo que nadie nunca imaginó pasara. El 2020 fue un año cargado de retos, de triunfos, de tristezas y de sueños. Durante la pandemia tuve una gran bendición llamada la Caja de Música Live y gracias a ella fue posible ayudar a muchas familias y nos llevó a demostrar que el vallenato aún tiene mucho para ofrecer. Por otro lado me ha dejado tristezas por la pérdida de familiares y personas cercanas, y retos porque la pandemia nos llevó a exigirnos y explorar cosas de nosotros mismos que ni siquiera conocíamos”.
