La emblemática estructura es sometida a un proceso de restauración para que se conserve como atractivo turístico y centro de eventos en este departamento.
El Castillo de San Antonio de Salgar, esa imponente edificación que se levanta en el municipio de Puerto Colombia, a 20 minutos de Barranquilla, es de los pocos vestigios que la época de la Colonia deja en este departamento.
Por la vista incomparable que ofrece y por la magia de su historia este castillo, que fue construido en 1848 sobre las ruinas del fortín de San Antonio, ha sido en los últimos años en el sitio predilecto de muchas parejas para celebrar su boda; de quinceañeras que quieren una fiesta de ensueño, y de muchos grandes festejos, así como epicentro de la visita de muchos turistas que llegan atraídos por su historia, en una región carente de este tipo de atractivos.
En 174 años de historia, el Castillo de Salgar ha sido fortín para inspeccionar y controlar el contrabando, estación de control aduanero, punto de control y defensa, cárcel, sede de colegio, instituto para personas con discapacidad, instituto académico, facultad de Bellas Artes de Uniatlántico, y más recientemente, tras ser restaurado, alberga un restaurante y un centro de eventos.
Recientemente, la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, anunció el inicio de las obras de mantenimiento del Castillo para convertirlo en “un espacio público de talla mundial”.
“No solo iniciamos las labores de mantenimiento y limpieza del Castillo de Salgar y sus alrededores. Llevamos meses soñando en grande y estructurando un megaproyecto para convertir este tesoro patrimonial es un espacio público de talla mundial que se posicione como un destino turístico obligado y donde se puedan llevar a cabo grandes eventos”, afirmó la gobernadora Elsa Noguera.
El Castillo de Salgar fue concesionado a la Caja de Compensación Familiar en 2016 y hasta inicios del año 2021 pues esta solicitó a la actual administración la terminación de dicho comodato, trámite que se surtió positivamente.
A la fecha se venían adelantando gestiones ante el Ministerio de Cultura para contar con el permiso necesario para operar el mantenimiento preventivo en la fachada exterior, permiso que se obtuvo el día de ayer.
Ya se adelantaron labores de limpieza en paredes del frente del castillo, puertas y ventanas, se realizó un diagnóstico para la intervención de paisajismo y pintura que se iniciaron el día lunes en horas de la mañana con el objetivo de que los turistas vivan una experiencia agradable a su llegada a este parador.
La meta es que este hermoso lugar vuelva a ser un ícono no solo arquitectónico y patrimonial, sino de experiencia culinaria y eventos en el Atlántico. “El diseño del nuevo proyecto, que contempla un mirador, zonas sociales y un cubo de cristal para eventos, estará a cargo del arquitecto José Pérez”, dijo finalmente la mandataria.