Siempre se ha dicho que comer frutas es saludable, sobre todo para seguir una dieta equilibrada. Porque su consumo nos ayuda a mantener unos buenos niveles de vitamina C y E, carotenos, retinol, potasio y sodio^. Son alimentos con alto contenido de fibra.

Aunque muchos consideran que el azúcar de las frutas no es considerado un problema, deberíamos controlar la cantidad que debemos consumir, más si se trata de una persona con diabetes.  

No todas las frutas son aptas para las personas que padecen esa enfermedad crónica e irreversible del metabolismo en la que se produce un exceso de glucosa en la sangre y orina. Hay unas frutas que por su composición natural tienen una fuerte carga de azúcar, y por lo tanto no deben ser consumidas por los diabéticos.

Los nutricionistas recomiendan no consumir, por ejemplo, plátanos maduros, uvas, mangos y papaya.

En cuanto a la sandía y el melón, por su alto índice glucémico (75 y 60, respectivamente) las convierte en alimentos que los diabéticos deben consumir con cuidado, pues pueden aumentar sus niveles de azúcar en la sangre demasiado rápido.

PUEDEN COMER

Cítricos: Las frutas cítricas como la naranja, la lima o los limones son perfectas para las personas que tienen problemas médicos con el azúcar, ya que poseen una carga e índice glucémicos bastante bajos.

Fresas: Como en el caso anterior, esta es una de las frutas que pueden comer los diabéticos sin ningún problema por su bajo contenido en azúcar. También cuenta con gran cantidad de vitamina C y potasio.

Manzanas preferiblemente verdes: Cuentan con una gran concentración de un tipo de fibra soluble, conocida como pectina, que mantiene los niveles de colesterol y glucosa estables.

Peras: Al igual que ocurre con las manzanas, las peras contienen una gran cantidad de fibras. Además, ayudan a luchar contra las enfermedades cardiovasculares y son ideales para potenciar la nutrición y desintoxicación del organismo.