Para levantar el ánimo y con buenos nutrientes, les presentamos hoy esta receta con productos fáciles de conseguir.
Nada más delicioso que disfrutar de una buena y exquisita sopita de esas que nos fortalecen en el estado de ánimo. Colombia es un país de sopas. Cada una de nuestras regiones tiene una sopa que la caracteriza y ni que hablar de los maravillosos «sancochos» que son diferentes en cada lugar. Por ejemplo, en toda la región de la Costa, un sancocho sin ñame, auyama y yuca, no es sancocho, en cambio el sancocho de las regiones del interior es con pura papa y bastante clarito. Mientras que nuestras sopas sabaneras tienen el cálculo perfecto de un espeso saludable.
Pero miren nada más la foto de esta sopa y que provocación produce. Dan ganas de entrar a la cocina y poner la olla. Pues no se diga más, porque pensé en algo bien nutritivo con un producto protagonista muy fácil de conseguir como son esos frijolitos blancos y unas verduras que nos recuerdan aquella otra atractiva sopa llamada minestrone.
RECETA
INGREDIENTES
400 –gr. de frijolitos blancos (pueden conseguirlos en lata)
1 -cebolla blanca
1 –tallo de puerro
1 – tallo de apio
2 –zanahorias
50 –gr de col
1 –papa
1 –tomate
1 –litro de caldo de verdura
1 –ramita de albahaca
40 –gr de queso parmesano
aceite de oliva – sal
PREPARACIÓN
Vamos a lavar muy bien todas las verduras y hortalizas. Pelamos la zanahoria y la papa. La cebolla, el puerro, la papa y la zanahoria la cortamos en daditos y rodajas. Troceamos el apio y la col, rallamos el tomate. En una cacerola grande ponemos un hilo de aceite y cuando esté caliente ponemos la cebolla y sofreímos hasta que esté tierna. Le agregamos el tomate, revolvemos y sofreímos un poco, incorporamos la zanahoria, la papa, el puerro, la col y el apio. Sofreímos todo por unos dos minutos y le ponemos el punto de sal. Agregamos el caldo y cocemos por unos minutos, escurrimos los frijolitos blancos y los agregamos con la ramita de albahaca bien picadita y cocinamos por unos minutos. Al servir, vamos a espolvorear el queso por encima. Si quieren pueden añadir una rebanada de pan frito, untada con ajo y perejil.
NOTA: Ustedes quedan como unas princesas con esta sopa, por su sabor y presentación. Ojo: ustedes pueden hacerla con los frijolitos blancos enlatados o dejándolos en remojo por la noche y al otro día cocerlos un poco. Este estilo de sopa se marida con vino rosado.